Los comercios del centro de Elche volvieron a salir ayer a la calle dentro de la campaña «Pop Up Store», que en esta ocasión se celebró en Obispo Tormo. La iniciativa, que pretende servir para dinamizar la actividad comercial en el centro de la ciudad, que viene sufriendo una continua pérdida de tiendas, cumplió su objetivo de atraer clientes.

De hecho, los comerciantes afirmaban sentirse muy satisfechos con esta jornada y se mostraron partidarios de repetirla en más ocasiones.

La actividad comercial de la mañana se inició más pronto de lo habitual en esta céntrica calle peatonal. Y ya pasado el mediodía, esta se mostraba repleta de ilicitanos que, atraídos por los estands y la música que animaba el ambiente gracias a un DJ, se acercaban a curiosear entre los puestos de establecimientos que sacaron sus productos a la calle.

Entre estos había desde ropa hasta perfumes, pasando por calzado y diversos complementos. Todo ello constituía una muestra de los comercios de Obispo Tormo, pero también de otros de calles cercanas que quisieron participar en esta campaña.

«Normalmente, no empezamos a tener gente hasta el mediodía, y esta mañana había gente en la calle desde las 10 horas», indicó Susi Vicente desde uno de los negocios de ropa y complementos que ayer tenían presencia en la vía pública.

Además, la comerciante se mostró partidaria de que sean varias calles las que saquen sus puestos en un mismo día, es decir que los comercios de una zona celebren esta jornada a la vez y, además, que se haga más con mayor frecuencia.

En el mismo sentido se expresó María Jesús Domingo, que destacó que el centro venía necesitando este tipo de actividad desde hace tiempo y que se trata de una iniciativa favorable para el comercio, ya que atrae gente. De hecho, la comerciante también calificó la iniciativa de positiva. «Es necesario que haya movimiento, y el centro estaba muy muerto». Así, del mismo modo, la responsable se mostró a favor de realizar este tipo de iniciativa «con continuidad».

Para los establecimientos, esta jornada también sirvió para derivar clientes que pasaban por la calle a sus locales. «Me acaban de decir que la tienda está llena», comentaba ayer satisfecho uno de los comerciantes que tiene su negocio de ropa en la zona. «Allí pueden ver más cosas y probarse», apuntó.