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El incremento de mayores que viven solos dispara los rescates de los bomberos

En 2015 se produjo de media una intervención cada dos días por emergencias o accidentes domésticos

Los bomberos sacan por el balcón a una persona por una urgencia médica, en Elche. antonio amorós

Los bomberos de Elche atendieron el año pasado de media una emergencia cada dos días relacionada con personas que habían sufrido algún accidente, problema de salud o que no respondían a las llamadas de vecinos y familiares y que no podían ser atendidas porque estaban solas dentro de sus casas. Los rescates en medio urbano de este tipo, 186 en el año 2015, han aumentado casi un 40% con respecto a hace dos años. En 2013 las estadísticas de bomberos registran 134 salidas, y en 2014 fueron 147, lo que da una idea de que estas situaciones van en aumento de forma progresiva. La razón -coinciden los responsables del cuerpo de emergencias en Elche y del área de Bienestar Social del Ayuntamiento- está directamente relacionada con el envejecimiento de la población y con el hecho de que cada vez más gente de edad avanzada viva sola.

Un vecino que escucha pedir auxilio por el patio del edificio, alguien que hace días que no consigue contactar con un familiar o servicios asistenciales como Cruz Roja a los que les suena la alarma de un botón de teleasistencia... Son algunas de las formas por las que estas emergencias llegan al Parque de Bomberos, aunque en ocasiones también son los sanitarios de las ambulancias o la Policía Local quienes transmiten la necesidad de entrar cuanto antes, aunque sea por la ventana.

Hasta tal punto forma parte del trabajo cotidiano de los bomberos, que los rescates urbanos son la segunda actividad de la que se registraron más actuaciones el año pasado, solo por detrás de los incendios, que son por lógica su primera ocupación, y por los que se registraron 540 salidas en 2015, 460 de ellas correspondientes a incendios urbanos.

El suboficial jefe del Área Operativa del Baix Vinalopó, José Soler, destaca que aunque la gente mayor y los problemas de salud son el principal motivo de los rescates urbanos, se dan también aunque de manera algo más residual las situaciones en las que menores de edad se quedan encerrados solos en casa. Estadísticamente, se computa conjuntamente. La actuación de los bomberos se limita en la mayoría e casos a abrir la puerta para que puedan acceder los servicios sanitarios o los familiares, aunque en otras ocasiones hay que ayudar a sacar de casa a personas con movilidad reducida, con sobrepeso o problemas articulares que no pueden ser trasladadas por el personal de la ambulancias y que, a veces, obligan a sacarles por las ventanas y los balcones inmovilizados en camillas.

Necesidades

La concejala de Bienestar Social, Tere Maciá, reconoce que el Ayuntamiento sí ha detectado un aumento de necesidades de teleasistencia y acompañamiento de personas mayores, y que en virtud de los datos está planteándose nuevas vías para prestarles servicios que necesitan. Uno de ellos es el dispositivo de contacto con Cruz Roja, que subvenciona el Consistorio para mayores de 75 años que residen solos o con otras personas también de edad avanzada o dependientes. Más de 1.500 domicilios ilicitanos tenían uno de esos dispositivos, al cierre del año 2015. «Sabemos que este problema se está dando», confirmó la edil, por lo que se están planteando medidas y estudios para analizar el envejecimiento de la población. El último informe estadístico municipal sobre población refleja el índice de envejecimiento ha subido hasta 93,8% (lo que significa que por cada cien menores de 15 años hay casi 94 mayores de 65) y que el índice de dependencia anciana es superior al juvenil, teniendo en cuenta que la media sube al 46,6% (lo que indica que de cada diez trabajadores potenciales dependen casi cinco personas entre menores y mayores).

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