El disparo de salida para que el actual tripartito pueda este año realizar inversiones en el municipio ilicitano se dio por fin ayer. Otra cosa es que los deseos del equipo de gobierno lleguen a buen término. La junta de gobierno aprobó los pliegos de prescripciones técnicas y cláusulas administrativas particulares que han de regir el contrato para la enajenación de bienes inmuebles de propiedad municipal, es decir, para la venta de suelo propiedad del Consistorio ilicitano.
Esto significa que en breve el Ayuntamiento va a sacar a la venta terrenos municipales con el fin de obtener fondos, dinero, el que consiga, que es el único que puede destinar a inversiones reales.
Las directrices estatales del Ministerio de Hacienda impiden, hoy por hoy, que el remanente de tesorería que puedan tener las arcas municipales se destine a algo que no sea amortizar deuda. Por tanto, la única posibilidad que las entidades municipales tienen para impulsar inversiones reales es mediante la venta de activos, en este caso parcelas.
Así las cosas, el Ejecutivo anunció ayer que sacará a subasta un total de 14 parcelas propias, localizadas tanto en el Camp d'Elx como en el casco urbano. En suma, significa ofrecer 17.000 m2.
Los responsables municipales esperan ingresar, en el caso de que cierren todas las operaciones, al menos 5,426.381,45 euros sin IVA, dinero con el que esperan hacer frente al flujo inversor recogido en los presupuestos para este ejercicio.
El Consistorio pone a la venta así terrenos en Torrellano, Las Bayas, Arenales del Sol, en la zona nueva de Altabix, San Antón, frente a Carrefour o en la carretera de salida hacia Alicante, por poner algunos ejemplos.
Las parcelas oscilan entre los 20 metros cuadrados (en la calle Carmelo Serrano), y los 4.400 m2 (en este último caso en el polígono industrial de Carrús). Asimismo, la horquilla de precios de licitación abarca desde los 49.510 euros y los 1.891.603 euros, según los casos.
Vinculación
Cabe recordar que en el último pleno del pasado año, cuando se aprobaron provisionalmente los presupuestos municipales del ejercicio 2016, la propia edil de Hacienda, Ana Arabid, reconocía que los ingresos apuntados en el presupuesto por venta de suelo municipal eran «inciertos», para reconocer que las inversiones reales están vinculadas a lo que se ingrese de esas parcelas: «No es irreal porque las inversiones se irán realizando conforme se vendan los terrenos».
El PP, el principal partido de la oposición, todavía está sonriendo entre dientes desde aquel pleno. Por su reciente experiencia al frente del Ayuntamiento en el anterior mandato, saben de primera mano lo que cuesta vender un solar por cómo está el mercado en la actualidad, y lo que cuesta también alcanzar el precio al que aspira el licitador.
De hecho, en aquel pleno, el edil popular Vicente Granero se mostraba ya totalmente escéptico sobre el hecho de que el tripartito pretenda ingresar 1,7 millones por una parcela, según dijo, en un enclave sin urbanizar.
El edil del Partido de Elche, Jesús Ruiz Pareja, todavía no formaba parte en aquel momento del actual tripartito, pero ya se sumaba a la incredulidad del PP al poner como ejemplo que el tripartito recogiera en sus presupuestos que quería vender un solar de algo más de 1.000 metros cuadrados por un millón de euros, según su alocución en el pleno municipal del pasado 23 de diciembre de 2015.
Algo más de 4,6 millones es lo que aparecía en inversiones reales en el presupuesto de 2014 y de 2015 (prorrogado), y 5,2 millones es lo que se recoge en el nuevo proyecto de presupuestos, que la concejala de Hacienda, Ana Arabid, calificó de «realista, comprometido y social».
El equipo de gobierno reconoce que no hay ninguna gran inversión (no habrá construcción de edificios por ejemplo) y que se ha apostado sobre todo en gasto para ayudar a las familias más necesitadas, a educación o empleo.
