La noticia de que, previsiblemente, el gigante Inditex va a seguir apostando en un futuro cercano por el municipio ilicitano, en concreto en multiplicar su centro logístico para convertirlo en todos los sentidos en un referencia mundial, sorprendió y agradó ayer a muchos trabajadores de fuera de la firma, pero no cogió desprevenidos a distintos empleados de la propia Tempe, la división de calzado y complementos del grupo Inditex que en Elche Parque Empresarial dispone ya de hasta tres grandes centros de trabajo.

Poco a poco la noticia fue corriendo por las distintas empresas de este polígono de Torrellano -aunque se conoce por aglutinar importantes marcas de calzado, el complejo acoge a un sinfín de empresas de todo tipo-. En bares y restaurantes, además del partido del Barça-Atlético, se comentaba, con el periódico que corría de mesa en mesa o por toda la barra, el deseo de que los planes de expansión de Inditex en Elche acaben por llegar a buen término.

«Para nosotros es una inyección constante e importante de clientes y de dinero», señalaba ayer José, trabajador del restaurante El Cigró, muy próximo al edificio conocido como Tempe 1, el cerebro de la división en Elche. Justo enfrente de este complejo empresarial, en la misma calle Severo Ochoa, se localiza lo que se conoce como Tempe 2, una instalación donde principalmente se genera parte de la producción. Tempe 3, el centro logístico, un verdadero monstruo de nave, se localiza lejos de ambos, en concreto entre la calle Nicolás Copérnico y, curiosamente, la denominada avenida del Calzado.

Es este el centro logístico que se quiere ampliar, localizado en un extremo del polígono industrial, pegado a la Vía Parque, y donde cerca existe mucho terreno disponible y urbanizado para ello, pero, aparentemente, en manos privadas en su mayoría.

«Lo he leído en el periódico y todo lo que sea más gente y más trabajo, bienvenido sea», agregaban en el mencionado restaurante, el cual sirve entre 40 y 50 comidas al día a los trabajadores de la multinacional.

En otro negocio similar que da a espaldas a Tempe I, en el restaurante Saladas, las 14 horas es una hora crítica. Los trabajadores acuden en masa para, bien sentarse a la mesa, bien para recoger comida y llevársela a su puesto de trabajo. Los abundantes platos calientes acompañados de pan y cubiertos de plástico a 2,5 o 3 euros son un clásico en este restaurante. Saben que en el servicio rápido y eficaz está la clave de su éxito para dar servicio a las decenas de trabajadores de Tempe a los que envían cada mañana a su propio mail un amplio menú para que puedan elegir y reservar incluso la hora de recogida.

«Va a ser bueno para todos, no solo para los bares, sino también para los desempleados», indica Laura que, con una hora para comer, acude habitualmente desde Tempe hasta este restaurante para hacerse, en el caso de ayer, con una lasaña suiza.

Ella y decenas de sus compañeros salen a almorzar y se distribuyen entre los distintos negocios de comidas. Y, si tienen algún hueco, aprovechan para ir de compras. No en vano, a este polígono industrial se le conoce también por la Ruta Outlet, puesto que cada vez más empresas deciden abrir tiendas para vender productos a precios rebajados.

En una de ellas, dos amigas, María y Lola, aseguran que no sabían nada de que Tempe fuera a ampliar instalaciones. «A buen seguro será todo para bien. Hace falta trabajo y, si Elche y la provincia se conocen fuera, pues mejor», reflexiona una de ellas, al tiempo que reconoce que existe una tienda outlet de Tempe en este polígono, pero no que tuviera tres naves aquí.

A la entrada de Tempe 1, en el puesto de control de acceso, están Soraya y Daniel. Han venido desde Alicante para presentar casualmente su currículum. «He oído que necesitan mujeres y aquí estoy», indica esta joven que lleva tres meses en paro, acompañado de Daniel, también desempleado y con experiencia en jardinería y electricidad.

«En Alicante está muy mal la cosa y estamos repartiendo curriculums en el polígono. Yo he trabajado 15 horas por 600 euros en la hostelería. Ojalá que cuando amplíen Tempe podamos tener trabajo», apunta el joven.

También a la entrada de Tempe 1 dos empleados afirman que han visto la noticia por internet y que ha corrido algo por el whatsapp no oficial de los grupos de trabajadores, pero que muchos ya sabían por rumores que Tempe tenía ganas de crecer aquí.

«Se sabía de antemano que querían ampliar en el polígono, en principio con los terrenos que hay al lado, pero es algo que se venía comentando de manera muy genérica», indica un empleado que prefiere no dar su nombre. De hecho, la multinacional, sobre proyectos de inversión, tiene por costumbre no comentar casi nunca sus planes a futuro.

«Tenemos tanto trabajo que parece normal que la empresa haya apostado por ampliarse. Se veía venir», añade otro trabajador que, al igual que otros muchos, ha oído de la iniciativa pero que desconoce si es algo que se da ya por seguro o en qué términos se podría hacer realidad.