Hacía tiempo que la industria del calzado no expresaba tan abiertamente una cierta inquietud ante el devenir de la economía internacional, a pesar de que 2015 volvió a ser un año récord en exportaciones y de que se están vendiendo pares de mayor precio. «Desde hace unos meses las expectativas de crecimiento internacional para 2016-2017 varían constantemente. Responden, en definitiva, a los tres retos a los que se enfrentan en esos momentos la economía mundial: las actuales amenazas geoestratégicas, la ralentización de la economía china y, a más plazo, un exceso generalizado de endeudamiento público-privado». Así lo entienden desde la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE), entidad que considera que se está dando una desaceleración en el crecimiento de las exportaciones.
Precisamente, ayer la patronal dio a conocer que las exportaciones del sector del calzado ascendieron en 2015 a 2.934 millones de euros, lo que representa un 11,1% más que el año anterior. No obstante, se exportaron 152 millones de pares, lo que significa un descenso del 1,3% y, también, que, en teoría, se está colocando un producto de mayor calidad y precio, de gama media y alta. Pese a ello, el crecimiento de este sector es 2,5 veces superior en valor al de las exportaciones españolas de mercancías.
«La desaceleración de los países emergentes, en especial y no únicamente a productores de petróleo y materias primas, así como la devaluación de sus monedas respecto al euro, con la consecuente ralentización de la demanda de importaciones, están frenando el crecimiento del comercio mundial. Preocupa un efecto dominó en los países occidentales», añaden desde la patronal del calzado.
En esta línea, FICE informa que las exportaciones a destinos extracomunitarios, 22% del total, han crecido un 4,3% en valor, aunque han caído un 6,5% en pares.
Por otro lado, las importaciones de calzado bajan un 10,2% en volumen, pero aumentan un 11,6% en valor. Es decir, se está importando un producto de mayor precio. El sector presenta un superávit comercial de casi 243 millones.
La patronal del calzado asegura que las empresas continúan realizando «un fuerte esfuerzo en contención de costes, mejoras en la productividad y ajustando márgenes para seguir ofreciendo en los mercados internacionales un producto altamente competitivo y de máxima calidad y diseño».
Por otra parte, también reconocen que la producción nacional se encuentra lejos de los niveles de 2007, antes de la crisis.
«El principal reto del sector es seguir creciendo, recuperando rentabilidad y con el margen de maniobra para poder seguir invirtiendo en marcas, distribución y tecnologías para generar empleo cualificado», añaden desde FICE.
