El Lunes de Pascua llega con una tradición que gusta a grandes y pequeños, como es el «Día de la Mona», una jornada en la que en Elche es tradicional salir a comer o merendar al aire libre y en la que no puede faltar el dulce característico, ya sea mona con huevo o la típica «fogaseta».

Y es que esta última es la auténtica reina ya no sólo de este día, sino de los días anteriores y posteriores, pues cada año son más los ilicitanos que al llegar estas fechas desayunan o meriendan este típico dulce.

Uno de los establecimientos donde al llegar Semana Santa hay una gran actividad es en la confitería Castell. Su responsable, Francisco Castell, explica que la receta es sencilla «una buena harina de fuerza, huevos, leche, aceite de oliva, ralladura de cítricos y un poco de levadura». No obstante, una cosa primordial en la producción artesanal de la «fogaseta» es el reposo, indica Castell.

«Cuanto más reposo más dura», indica el pastelero. Así, la masa se deja reposar unas doce horas sin precipitar el proceso de ninguna forma, apunta el pastelero.

Además, a los dulces más tradicionales se suman cada año nuevas variedades que tratan de captar la atención de nuevo público o incluso destinados para satisfacer a aquellos que no pueden consumir el producto típico.

Así, existe un tipo de «fogaseta» pensada para gente con diabetes y que se elabora sin azúcar. «En su lugar se emplea el maltitol, un polialcohol lento que hornea sin amargar», indica Castell.

Por otro lado, desde esta pastelería han salido, las 2.500 monas que la cofradía del Santísimo Cristo del Perdón envía cada año a los reclusos de Fontcalent, al psiquiátrico y Villena.

En cuanto a la innovación, también se ha comenzado a introducir en Elche la variedad de monas típicas de Cataluña y cada vez hay más establecimientos que ofrecen estas figuras de chocolate elaboradas incluso por encargo a gusto del consumidor. A ello se le unen huevos de Pascua, también elaborados con chocolate, y que son típicos de otros países.

Por otro lado, desde productos Lozano indicaban que de sus hornos saldrían este año más de 20.000 monas durante Semana Santa, tanto la versión clásica como nuevas variedades rellenas de nata, chocolate, crema o merengue ya que el pasado año tuvieron gran aceptación, según apunta el gerente de la marca, José Luis Lozano.

De hecho, el repostero ilicitano señaló que «cada año nos vemos obligados a aumentar nuestra producción». En total calcula que distribuirán unas 7.000 monas de huevo y 14.000 normales, entre Elche y parte de la provincia de Alicante.

Así, ya sea tradicional, de las nuevas variedades o incluso elaborada por uno mismo en casa, para los ilicitanos lo principal será degustarla en un día festivo en compañía de familiares y amigos y para algunos, acompañada de chocolate.