La ruptura del tripartito y la formación de un nuevo Gobierno municipal también a tres bandas, aunque ahora en minoría, va camino de salir caro para las arcas municipales. Hasta ahora, Ilicitanos por Elche había hecho de dique de contención, y no sólo había bloqueado cualquier intento de contratación de más cargos de confianza por parte de sus socios de gobierno, sino que incluso su portavoz, Cristina Martínez, no dejó de gritar a los cuatro vientos en los ocho meses que estuvo en el Ejecutivo que no iba a cobrar nada como concejal, aunque, eso sí, nunca renunció a las indemnizaciones que iba recibiendo por asistencia a comisiones, plenos y demás, mientras afeaba a otros el que estuvieran en política a cambio de un sueldo. La situación, sin embargo, acaba de dar un giro de 180 grados. Con la jefa de Ilicitanos fuera del equipo, el nuevo tripartito ha abierto la veda, sumando seis nuevos asesores, cierto es que dos de ellos con dedicación parcial, y llegando así a los 19 si se suman los de todos los grupos. No queda ahí la cosa: la propia Cristina Martínez, según el decreto que acaba de firmar el alcalde, Carlos González, y que debe pasar por el pleno del martes, ha pedido una dedicación parcial. Precisamente esa parcial también se ha dado a la edil de C's Eva María Crisol. Esta figura a la que se acogen una y otra regidora, en la práctica, vendría a asimilarse a una media jornada, permitiendo así compatibilizarlo con otras ocupaciones y, al final, en bruto, viene a suponer 1.494 euros brutos al mes para cada una.
Con la nueva tanda de decretos, todos los partidos con representación municipal salen ganando, salvo el PP, que se queda como estaba: con dos ediles con dedicación exclusiva -Vicente Granero y Erica Sánchez-, y un funcionario eventual, Esther Alonso, hermana de Mercedes Alonso y jefa de su gabinete en el anterior mandato. A partir de ahí, el PSOE ha llamado a Javier Baeza para que se haga cargo de los espacios culturales, con un decreto que, desde el principio del mandato, era público y notorio que sólo era cuestión de tiempo. Junto a él, Francisco Escudero se convertirá en coordinador de los museos, aunque no será éste su único cometido. Paradojas de la vida, Escudero, que en los últimos años había sido el gestor cultural del legado del poeta de Miguel Hernández en Quesada, en Jaén, será el encargado de poner en marcha el Centro Hernandiano, cerrado desde hace unos seis años, que nunca se llegó a poner en marcha, y que se quiere impulsar ahora, justo cuando el patrimonio del autor de «Perito en Lunas» está como a unos 300 kilómetros. La intención, alegaron desde el equipo de gobierno, es ir tirando de exposiciones temporales sobre el poeta.
Mientras tanto, Compromís también ha propuesto a otras dos personas: Encarni Ibarra, que desempeña desde principios de marzo sus labores en Participación, Comunicación -pese a que el Gabinete de Prensa ya cuenta con dos personas, Isabel Selva y María Andreu, ambas propuestas por el PSOE, pero que deben trabajar para todo el equipo de gobierno-, y redes sociales. Junto a ella, ha entrado a trabajar, también desde comienzos de marzo, Juan Antonio Juárez, para Participación. En cualquier caso, tanto una como el otro tienen una dedicación parcial, lo que, en términos económicos, debería computar, si las horas extra lo permiten, como un solo funcionario eventual.
Por su parte, el Partido de Elche pasará a contar con otro nuevo funcionario de empleo para Deportes, Juan Antonio Suárez, que ya estaba como tal en el anterior mandato, y que estará junto a Mari Carmen Guillén, que es la otra asesora que Jesús Pareja tiene desde el inicio del mandato.
Finalmente, Ciudadanos está previsto que gane otro asesor: Gonzalo Espinosa, quien iba en las listas para el Congreso en las elecciones de diciembre y que se acabó quedando fuera. Lo que no está claro es si sólo trabajará como funcionario del grupo municipal, o tendrá alguna función añadida.
Con estos puntos de partida, el PSOE (ocho concejales) habrá dado trabajo en suma a ocho asesores; Compromís (cuatro ediles), a seis, dos con dedicación parcial; y Partido de Elche (con un regidor), a dos asesores. En total, 16 asesores para el nuevo tripartito, mientras que C's está previsto que pase de uno a dos, y los populares se quedan con uno. No en vano, el PP de Mercedes Alonso, que no dio funcionario al PSOE pero sí a Pareja, llegó a 14, aunque acabaría su etapa con 13, tras el despido de uno de los asesores contratados inicialmente. Sea como sea, las designaciones, que deben pasar por el pleno del martes, donde se dará cuenta de ellas, estuvieron en el centro de no pocos corrillos políticos ayer por la mañana.
Cuestiones como que C's salga reforzado precisamente ahora, tras quedarse el tripartito en minoría, y disponga de más medios con tres ediles que el propio PP con nueve regidores son cuestiones que nadie perdió de vista. Incluso entre determinados sectores se cuestionaba la interpretación del acuerdo plenario del 29 de junio del año pasado, que establece que a grupos municipales de la oposición de hasta tres miembros les corresponde una dedicación completa y una parcial y, a partir de tres, dos plenas, y si, por tanto, C's tenía que estar en un lado o en otro. Ahora bien, por encima de todo, la comidilla en la casa grande fue la petición de la portavoz de Ilicitanos cursada el 7 de marzo para tener esa dedicación parcial. «Al final, la han hecho caer en su propia trampa, precisamente a ella que tanto criticó que se cobrara», comentaba irónicamente alguien en el Ayuntamiento.
