La SAT (Sociedad Agraria de Transformación) San Enrique ga garantizado a sus 600 comuneros que tendrán agua de riego este verano, gracias al trasvase del Júcar-Vinalopó. Una noticia recibida ayer, durante la asamblea general de la agrupación, como «agua de mayo» para los regantes de las partidas de Carrús, Llano San José, Peña Las Águilas y parte de Aspe.

El presidente de la entidad, Ángel Urbina trasmitió ayer un mensaje de tranquilidad al centenar de asistentes a la convocatoria, después de que desde el pasado martes comenzara a entrar agua, procedente del trasvase. «Esta reivindicación histórica, que durante tres años lleva siendo posible, ha sido aplaudida entre los comuneros, que podrán atender con normalidad a sus cultivos de cítricos y hortalizas», explicó Urbina. Asimismo, el representate de la SAT San Enrique apuntó que «nuestro objetivo es que en mayo los embalses estén llenos y así garantizar el agua de riego para la temporada estival. A partir de octubre será cuando tengamos que volver a reclamar la llegada de agua».

Con ello, la sociedad se encuentra ahora negociando un convenio para conseguir recursos hídricos después del verano.

Por otra parte, pese a que otras comunidades de regantes se han visto obligadas a subir el precio del agua, la SAT San Enrique aprobó en la jornada de ayer mantener el coste de 50 euros la hora. Durante la asamblea, también dieron luz verde a las cuentas de 2015, con unos gastos de 200.000 euros y unos ingresos de 224.000 euros. «Estamos ante unas cuentas equilibradas y gozan de una buena salud», alabó Ángel Urbina.

Por otra parte, la agrupación señaló la importancia de modernizar los regadíos de la zona, como asunto pendiente, que está paralizado ante la falta de financiación del Consell. «Cuando se estabilice el Gobierno central empezaremos con los trámites para conseguir que este reclamo se convierta en realidad, por lo que habrá que buscar financiación», matizó Urbina.