La Conselleria de Educación empezará a trabajar la próxima semana en la reparación del muro del Instituto de Educación Secundaria de Torrellano, que se desplomó el pasado domingo, sin causar heridos, al estar el centro escolar cerrado en ese momento.

El alcalde de Elche, Carlos González; la edil de Relaciones Institucionales, Mireia Mollà; la edil de Educación, Patricia Macià; y el concejal de Pedanías, Héctor Díez, se trasladaron ayer hasta el instituto de Torrellano para comprobar, in situ, el estado en el que quedó el muro, del que se desprendió el recubrimiento, que estaba pendiente de reparación.

Los representantes municipales se reunieron con la dirección del centro, y con representantes de la Asociación de Madres y Padres, con el fin de mediar ante la Conselleria de Educación, que es quien tiene las competencias en esta materia, para reparar cuanto antes el muro afectado.

La concejal de Educación, Patricia Macià, explicó al término del encuentro que «nos hemos puesto en contacto con la dirección territorial de Educación para que reparen cuanto antes el muro. Desde Educación nos han confirmado que está todo controlado por lo que desde aquí queremos mandar un mensaje de tranquilidad a los padres».

Concretamente, según indicaron ayer fuentes municipales, está previsto que la Conselleria empiece a trabajar en el instituto la próxima semana. Primero se procederá al desescombro, para retirar todo el material que ha quedado esparcido por una zona de aparcamientos.

Después, se procederá a reparar el muro. El objetivo es volver a colocar el recubrimiento del muro de ladrillos, que es lo que se desplomó el pasado domingo sin causar más daños.

El desprendimiento del recubrimiento del muro se produjo unos días después de que se advirtiesen deficiencias. Concretamente, el pasado jueves, la dirección territorial de Educación alertó al Ayuntamiento del mal estado del muro, que da a una zona de aparcamientos.

Tras recibir este aviso, el Ayuntamiento envió a una brigada municipal, que procedió a vallar la zona afectada, ante el temor de que se produjera el desprendimiento, como, finalmente, sucedió el pasado domingo.