Fuentes municipales han estimado que colocar una bandera nueva en el mástil de 18 metros del Paseo de la Estación puede suponer un desembolso próximo a los 600 euros. No hay que olvidar que se trata de una tela de 70 metros cuadrados y que el lunes, medio rota, se tuvo que retirar de nuevo por las fuertes rachas de viento. La señera, desprendida, ya ha generado en el pasado alguna que otra situación de peligro para conductores y viandantes, de ahí que por precaución se decidiera desmontarla.

El equipo de gobierno, que está más en garantizar su propio futuro que en estos «pequeños» detalles, reconoce que la verdad es que todavía no se ha planteado si seguir adelante con una iniciativa del PP, que la inauguró un 6 de diciembre de 2012, o descartarla.

Cabe recordar que esta bandera siempre es motivo de polémica, hay división de opiniones a favor y en contra entre la población. Además, hace dos años, Compromís criticó que se comprara de nuevo una bandera para sustituir otra rota justo en tiempos de crisis. La actual, tal y como está de dañada, no se puede volver a izar.