El secretario general de los socialistas y alcalde de Elche, Carlos González, así como el grupo municipal socialista en el Ayuntamiento, recibió ayer el respaldo «unánime» de todo el partido durante una reunión extraordinaria y abierta de la ejecutiva.

No obstante, algunas voces críticas le reprocharon en cierta medida que hubiera permitido tanto tiempo esta situación con Ilicitanos por Elche, le conminaron a que empiece a poner en marcha proyectos efectivos para la ciudad y de igual modo se le afeó en cierta medida que no hubiera informado antes a todos los integrantes del órgano de gobierno de la agrupación socialista.

En una ejecutiva abierta, con varias decenas de militantes, estos coincidieron en que esta ruptura se veía venir y que se avecinan tiempos complicados para la estabilidad municipal.

La ejecutiva socialista respalda al unísono la decisión tomada ayer de retirar a los ediles de Ilicitanos por Elche, Cristina Martínez y Fernando Durá, sus competencias dentro del Ejecutivo.

Los socialistas indicaron ayer que este paso era «necesario« ante la «deslealtad de Martínez al proyecto y, sobre todo, al alcalde», al tiempo que solicitaron que el grupo entable conversaciones con otros partidos de la oposición, menos el PP, para garantizar la gobernabilidad.

Tras las explicaciones del secretario general local, miembros de la ejecutiva le trasladaron, según fuentes de la sede de General Cosidó, que «era más que necesario tomar esta determinación ante la deslealtad demostrada, ante los constantes insultos a la agrupación y al PSOE y ante el bloqueo que Cristina Martínez tenía sometida la gestión del Ayuntamiento en muchas ocasiones».

Además, los socialistas han solicitado que se aclare la situación con los miembros de Compromís que están en el Gobierno e inicien una nueva etapa en el Ayuntamiento «marcada por el diálogo, la seriedad, la responsabilidad, la buena gestión y con los ciudadanos como protagonistas».