El Consejo Regulador que tendrá que controlar el uso de la marca protegida «Granada Mollar de Elche» o «Granada de Elche» comenzará a andar en cuestión de unos dos meses, previsiblemente a finales de marzo o principios abril, y abrirá una sede física en el edificio del IVIA (Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias), ubicado en la carretera de Dolores. Ese inmueble es precisamente el que pidió la Asociación de Productores y Comercializadores de Granada, presidida por Francisco Oliva, por su buena ubicación para atender no solo a agricultores y vendedores de Elche, sino de los restantes 39 municipios que están amparados por la concesión que el martes publicó la Unión Europea. Se trata de todos los términos municipales de Vega Baja, Baix Vinalopó y L'Alacantí, que verán sus intereses centralizados en un Consejo Regulador en el que tienen que inscribirse quienes quieran pertenecer y para el que ya se están elaborando dos censos (uno de productores y otro de comercializadores).
Una vez acabados esos dos listados, los inscritos podrán escoger a sus representantes en el Consejo Regulador en un proceso electoral que está por convocar y por determinar por la Generalitat. El organismo también tendrá que tener un presidente, un secretario y un gerente, según concretó ayer Francisco Oliva. Antes de esas votaciones y decisiones, la Asociación de Granadas tiene la intención de reunir a todos los interesados en una asamblea informativa en la que expondrán a qué se comprometen los miembros de la DO y qué promoción y respaldo obtendrán a cambio.
El objetivo inaplazable es llegar a la campaña de 2016 con todo en marcha para poder comenzar a utilizar las etiquetas que distingan a las granadas incluidas en la DOP de otras (el corte del fruto arranca entre septiembre y octubre, según la climatología).
Para centralizar todo ese trabajo -también el de los inspectores que harán visitas al campo o medirán la calidad de los frutos que se etiqueten con esta marca-, es fundamental tener una sede física que, según concretaron ayer el presidente de la Asociación y el alcalde de Elche, Carlos González, ya se ha acordado con la Conselleria de Agricultura. González aseguró que ese es el compromiso adquirido por el secretario económico de Agricultura según las últimas conversaciones, y consideró que en cuestión de semanas podrán firmarse los acuerdos necesarios para inaugurarla.
Mientras tanto, Francisco Oliva reiteró ayer que se espera que el reconocimiento europeo sirva para que los consumidores identifiquen y pidan la granada de la variedad autóctona ilicitana y que sea una marca que promocione todo el territorio. El alcalde, por su parte, ensalzó el trabajo que la Asociación con el apoyo de las administraciones ha llevado a cabo para conseguir «un reto, un anhelo» del sector que «nos llena de orgullo a todos» y que tendrá su reflejo y repercusión en la gastronomía, la industria agroalimentaria o el turismo rural.
Defensa
El regidor recordó que el sector de la granada abarca 3.000 hectáreas en los municipios incluidos en la zona geográfica protegida, que en ellos se cosechan 50.000 toneladas anuales que suponen el 90% de la producción de granada total de España y que generan 3.000 puestos de trabajo directos y otros 1.000 indirectos.
En defensa de este sector, Oliva añadió ayer que una de las funciones del Consejo Regulador será impedir que quienes no produzcan en los términos y calidades amparados por la DOP y que no formen parte de ella o tengan sus cosechas fuera de la zona protegida utilicen el nombre «Granada de Elche», algo que aseguró que está ocurriendo en la actualidad y que se combatirá con las herramientas legales que concede el reconocimiento de la Denominación de Origen.
