El taller de respiro familiar, dirigido a usuarios con discapacidad, volvió a suspenderse ayer por segundo sábado consecutivo, después de que hace dos semanas el tripartito apartara a DYA de la responsabilidad de esta tarea. Pese a que la edil de Bienestar Social, Tere Macià, asegurara el lunes que el taller no se iba a volver a interrumpir, ayer la actividad no se pudo llevar a cabo en el centro Francesc Cantó.

Según la edil del área, el miércoles mantuvo una reunión con los familiares de los 37 usuarios inscritos y «acordamos normalizar la situación de este servicio que hasta ahora se estaba prestando de forma irregular». En esta línea, la concejal de Bienestar Social aseguró que «la principal reivindicación que nos trasladaron los padres es la importancia de que continuara el mismo equipo que durante tantos años ha tratado a los usuarios».

Ante ello, desde el ejecutivo local trasladaron ayer que «el hecho de que no se haya abierto responde a que no ha habido tiempo suficiente para normalizar los contratos de los monitores, algo que esperamos hacer en los próximos días». Asimismo, Maciá afirmó que contarán con la misma psicóloga encargada anteriormente del taller, que funcionará de manera autónoma y que contratará a los cuatro monitores, que prestaban servicio a través de DYA.

De esta forma, el servicio funcionara de forma provisional, durante seis sesiones, pero «ajustado a la legalidad, hasta que se elabore el pliego para la contratación de una empresa», apuntó la concejal de Bienestar Social.

Por su parte, el presidente de la Asociación de Familias con Personas Discapacitadas Psíquicas de Elche (ANOA), Diego Benítez, sugirió mejorar el servicio «ante el descontrol existente« y propuso «ajustar las necesidades y a los perfiles de los usuarios el material humano, que está descompensado».

Críticas del PP

Desde el Partido Popular criticó que se hayan interrumpido los talleres y acusó al equipo de gobierno de mentir. Los populares denunciaron en un comunicado que «muchos de los padres afectados se han dirigido a nosotros para mostrar su rechazo a las formas de actuar del tripartito y sobre todo solicitando que se tenga en cuanta su opinión a la hora de realizar modificaciones en servicios tan especiales como son los talleres de respiro familiar».

La concejal de Bienestar Social apuntó que el PP debería «mantenerse callado después de haber cometido numerosas irregularidades en la prestación de estos servicios en los últimos años».