La edil de Compromís, Mireia Mollà, y la concejala de Ilicitanos por Elche, Cristina Martínez, salieron ayer a responder al PP y al concejal Vicente Granero que el día anterior afirmó que ambas estaban diciendo en algunos círculos que ya contaban con informes municipales en contra para «cargarse» el Mercado Central.

Mollà calificó estas palabras, y el hecho de que Granero también diera a entender que se estaba presionando a los funcionarios que elaboran los informes sobre el mercado de abastos, de «vomitera verbal».

«Son unas palabras desafortunadas, desagradables de Vicente Granero, rozando las líneas rojas, acusándonos de estar presionando a los funcionarios en un sentido u otro», declaró Mollà, quien, a renglón seguido, aseguró que ambas no conocían el contenido de los informes y que en su caso ni sabía de los funcionarios que los están elaborando. «Están hechos por funcionarios que cumplen las leyes y se deben a su labor», dijo Mollà.

Por su parte, Cristina Martínez también afirmó: «Ni Mireia ni Cristina han tenido contacto alguno con los funcionarios. El que acusa es el que debe demostrar lo que está acusando».

Ambas concejales llegaron incluso a repetir por separado una misma frase: «Cree el ladrón que todos son de su misma condición».