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El colegio Antonio Machado pide que analice el ruido en el centro

Los docentes utilizan la vía laboral para intentar que la administración insonorice las aulas

El colegio Antonio Machado pide que analice el ruido en el centro

La comunidad educativa del Antonio Machado, uno de los colegios públicos de Torrellano, no está dispuesta a quedarse de brazos cruzados ante la negativa de Aena a su petición de insonorizar las aulas que soportan el ruido de los aviones del Aeropuerto Alicante-Elche, sobre todo, cuando despegan en dirección a la pedanía. Para conseguir su objetivo, después de una década de reivindicaciones, el centro va a solicitar la Inspección de Trabajo que analice el ruido con el que se ven obligados a trabajar los docentes.

Y es que cada vez que sopla viento de poniente y los aviones despegan en dirección al casco urbano de Torrellano el ruido es tal que los maestros optan por callarse, hasta que pase el avión, para no perder la atención de los alumnos.

Desde la Asociación de Madres y Padres del colegio público Antonio Machado ven más que necesario que realicen las pruebas acústicas en el centro. «Sabemos que Aena se rige por unos criterios matemáticos en función del número de vuelos y el ruido que les dicen las compañías que emiten los aviones. Pero una cosa son los números y otra la realidad que soportamos en el colegio», decía ayer un padre a este diario.

Por otro lado, el AMPA del centro educativo ha pedido ayuda al Síndic de Greuges que ha admitido a trámite su queja. El presidente del AMPA del colegio Antonio Machado, Jacob Galindo, explicó ayer que «además de pedir a la Inspección de Trabajo que se interese por el tema, hemos decidido poner una queja en el Síndic de Greuges, que la ha admitido a trámite».

Jacob Galindo indicó que «nuestro objetivo pasa porque se realice un estudio acústico en el colegio, para que se vea con cifras reales el ruido que soportan los niños en clase, por quedarse a unos metros de la huella acústica que marcha Aena. El problema es que el estudio cuesta dinero, y por eso nadie lo quiere hacer».

El colectivo de padres insiste a la administración que debe realizar un estudio «in situ» para saber a ciencia cierta cuál es la realidad sonora del colegio público. «Llevamos mucho tiempo con esta situación y en verano nos dieron muy pocas esperanzas, pero vamos a seguir reclamando que se proteja el colegio del ruido de los aviones», sentenció el presidente del AMPA, Jacob Galindo.

Problemática

El colegio Antonio Machado de Torrellano no entró dentro de la huela acústica que el Ministerio de Medio Ambiente está obligado a proteger, subvencionando la insonorización de los inmuebles, por pocos metros. No obstante, cada vez que los aviones despegan en dirección a la pedanía, aprovechando el viento de poniente, el ruido es «ensordecedor».

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