Recuperar las cifras de resultados que obtenía el calzado antes de la crisis es uno de los objetivos centrales que se plantea el nuevo presidente ejecutivo de la patronal. Junto a este reto, Monzonís considera vital promocionar el calzado para conseguir un relevo de personal que preocupa a las empresas españolas, mejorar la productividad con nuevas técnicas de gestión y abrir mercado. América del Norte y Asia Pacífico son para el presidente de FICE los destinos sobre los que el sector ha de ampliar fronteras y mejorar las exportaciones.
¿Qué retos se plantea como nuevo presidente de la patronal del calzado?
El plan estratégico que se ha aprobado en el comité fija básicamente como objetivos velar por una nueva etapa de crecimiento, recuperación de márgenes, que con el enorme esfuerzo que han hecho las empresas estos últimos años en materia de exportación es evidente que se ha visto disminuido con mucha frecuencia. Y acompañar al conjunto de las empresas de calzado en un proceso de sostenibilidad a largo plazo. Hacer una clara apuesta por seguir atrayendo a jóvenes al mundo del calzado, esto se traduce en varios ejes más concretos.
La necesidad de un relevo generacional es una de las grandes preocupaciones para el sector, ¿qué iniciativas propone?
Es un problema la falta de conexión entre los jóvenes en España y el mundo industrial, es una consecuencia de la década anterior, aunque el sector del calzado está siendo cada vez más atractivo en la captación de nuevos trabajadores y nuevos mandos intermedios. Lo que pretendemos es que cada empresa deba seguir trabajando para hacer más atractiva su mercantil al entorno laboral y desde la propia federación lo que tenemos que hacer es apoyar a las empresas tratando dotarlas de herramientas de formación y de gestión de recursos humanos. Además de ser capaces de lanzar un mensaje por los canales más idóneos de que el sector del calzado tiene futuro en el que muchos jóvenes pueden tener no sólo una profesión, sino también un estilo de vida.
¿Cuáles son las amenazas del calzado ahora mismo?
Más que amenazas, a mí me gustaría hablar de fortalezas y debilidades. Como principal debilidad seguiría hablando de márgenes. Para que las empresas sigan creando marca e invirtiendo en la expansión de sus puntos de venta hace falta tener rentabilidad adecuada para poder invertir. Hay que reforzar este punto con técnicas de gestión en la productividad de las empresas. Ese va a ser uno de los ejes sobre los que vamos a trabajar. Entre las fortalezas destacamos la posibilidad que tenemos de posicionar nuestras marcas en segmentos medios, medio-altos y altos, lo cual nos está dando una visibilidad muy importante en todos los mercados internacionales. La recuperación de la demanda privada y del consumo también está siendo importante en ese sentido. La calidad, el diseño y la marca y los precios competitivos suponen una fortaleza importante sobre la que buscar nuevas oportunidades.
¿Dónde es posible encontrar nuevas oportunidades?
Nos sólo en los mercados más próximos que se están recuperando, incluido el mercado nacional, sino también donde vamos a centrar nuestras actividades futuras de promoción, en Norteamérica y Asia-Pacífico. Ambas tienen que ser un área importante de expansión no sólo para el calzado, sino de otros productos españoles.
¿Por qué la necesidad de llegar a más mercados?
No es una cuestión de llegar a más mercados, sino más eficientemente. En estos momentos, el calzado español se exporta a más de 150 o 170 países. Sin embargo, son casi diez mercados los que concentran en torno al 70% o el 80% de las ventas. Esto significa que tenemos mucho potencial de recorrido en otros países. De ahí a que apuntara al esfuerzo que tenemos que hacer por llegar mucho mejor y más en términos cuantitativos a Norteamérica y Asia- Pacífico.
¿En qué proyectos están trabajando para lograr aumentar la productividad del calzado?
Estamos trabajando en la Escuela de Organización Industrial, EOI, que también tiene sede en Elche y es experta en técnicas de producción, para mejorar la formación en aulas y en plantas de fabricación con el método «lean management», muy usado en el sector de la automoción. Ayudaría a mejorar los tiempos de respuesta y calidad, estandarizar los procesos de mejora continua, ahorrar costes y servir con más eficiencia a los clientes.
Elche ha solicitado al Ministerio apoyos para convertirse en centro nacional de referencia del calzado, ¿cree que el sector del calzado de la ciudad ilicitana y la provincia de Alicante podría recibir un mayor respaldo de las administraciones?
No podemos olvidarnos que la provincia de Alicante, en concreto el eje Elche-Elda- Villena, suponen un porcentaje muy elevado de empresas y de trabajadores del conjunto del calzado español. A cien kilómetros alrededor de Elche se encuentra toda un 70% de toda la capacidad actual y productiva del calzado. Así que, que mejor sitio que poblaciones como Elche para reforzar todas las iniciativas en materia de formación.
