El mercado provisional que se construyó para reubicar a la mayoría de los vendedores del Mercado Central de Elche, y que está localizado en la avenida de la Comunidad Valenciana, ha registrado un 300% de incremento de afluencia de personas en comparación con lo que venía generándose en el antiguo inmueble.
La empresa concesionaria de las obras para levantar el nuevo edificio, Aparcisa, así lo afirma, al tiempo que estima un incremento de las ventas en un 40% de media incremento de las ventasdesde que los placeros han sido reubicados en el nuevo espacio temporal.
Desde la mercantil se indica que algunos vendedores han mejorado sus ventas por encima de ese porcentaje y otros también es verdad no lo han alcanzado, pero sí que prácticamente la totalidad ha mejorado en mayor o menor medida su porcentaje de ventas desde que ocupan los nuevos puestos.
«Hay gente que nos dice que ha triplicado la facturación en sábado, y otros que nos comentan que en unos pocos días han pasado de 100 hamburguesas a vender 500», señalan desde la concesionaria.
Manuel Valverde, portavoz de los placeros del mercado provisional, no se atreve por su parte a concretar una cifra media de aumento de ventas. En su caso, por ejemplo, asegura que sí ha experimentado entre un 15 y un 20 por ciento de aumento en su negocio.
De dos plantas a una
«Arriba no subía prácticamente nadie, por lo que los puestos de carne, salazón, encurtidos o pollería han notado un incremento considerable», indica Valverde, rememorando la anterior distribución de los puestos, en dos plantas, en el edificio tradicional.
Ahora, casi medio centenar de vendedores ocupan una superficie aproximada de 1.000 metros cuadrados en una única planta, con una fachada de 70 metros de largo y 13,5 metros de ancho, además de contar con vistas a la ladera del río.
«La limpieza, la luminosidad y la accesibilidad están haciendo muy atractivo a este mercado, donde la afluencia es mayor. Incluso un viernes por la tarde viene tanta gente como un sábado por la mañana», explica Manuel Valverde.
Tres tardes a la semana
El mercado tradicional, desde que está en su nueva ubicación, también abre miércoles, jueves y viernes de 17.30 a 21 horas, es decir, más horas, lo que también contribuye a mejorar los números.
Desde Aparcisa añaden además que se ha conseguido ampliar la horquilla de edad del cliente. «Antes captar gente menor de 40 años era muy difícil. Ahora ves ciudadanos de entre 30 y 50 comprando. Lo cierto es que las nuevas instalaciones han animado a los vecinos de la zona a comprar aquí», agregan.
Este próximo sábado se cumplirán seis meses desde que la gran mayoría de los placeros del Mercado Central decidieron abrir sus puestos en las instalaciones provisionales. En el antiguo edificio permanecen cerca de una decena de placeros que no quisieron firmar con la adjudicataria de las obras.
Por otra parte, los placeros y Aparcisa ya están pensando en la inminente campaña de Navidad y están estudiando la posibilidad de ofrecer bonificaciones para los que aparquen en la zona azul y realicen compras en el mercado, hasta sorteos o regalos. También se pretende que algunas plazas de estacionamiento justo al lado de las instalaciones del mercado provisional se reservan para minusválidos.
