Otro de los momentos más significativos del pleno de ayer se produjo cuando los dos ediles de Ilicitanos por Elche, que conforma el tripartito con PSOE y Compromís, votaron junto con la oposición (PP, Ciudadanos y Partido de Elche) para que el equipo de gobierno paralizara el pago de 250.000 euros pendientes de abonar por el llamado archivo histórico o de la memoria.
Ilicitanos por Elche de nuevo fue coherente consigo mismo y con su electorado y con su voto impidió (al menos formalmente) que PSOE y Compromís continuaran por este camino.
Todo comenzó con una moción «in voce» del edil popular Pablo Ruz, quien exigió su paralización «ante la que está cayendo». El concejal aseguró que no existía tasación de ese archivo (que es en realidad un fondo de miles de documentos del filólogo, escritor e historiador Manuel Sanchis Guarner fechados entre mediados de los 60 y los 80). «Nos suben el IBI para pagar el "arxiu". Es un absoluto escándalo», indicó Ruz en el pleno.
Mireia Mollà (Compromís) contestó que no estaba en el presupuesto de 2016 pagar ni todo ni una parte de lo que queda pendiente de este «arxiu de la memòria», 250.000 euros, mientras que la edil de Cultura, Patricia Macià, defendió que se trata de un fondo «muy reclamado por historiadores», que hay «miles de documentos» en la biblioteca de San José, además de ser el «archivo más importante sobre la Transición». Además, según dijo, el anterior archivero municipal lo valoró en 1,2 millones de euros, para, finalmente, arremeter contra el PP al recordarle que preferían gastar importantes cantidades de dinero en maceteros antes que en cultura.
Pese a que se votó paralizar el pago, el alcalde, Carlos González, aseguró que no hay ningún trámite en marcha en este sentido y que por tanto no tenía ninguna eficacia la votación de ayer.
El pleno de ayer también sirvió para que Carlos Sánchez prometiera su cargo como nuevo edil del PSOE, para ocupar el área de Aperturas (en lugar de la dimitida Puri Vives) que compatibilizará con su labor docente.
Al pleno, entre otros, asistió un grupo de alumnos del centro concertado San José de Calasanz.
