Los vendedores del mercado provisional exigieron ayer al equipo de gobierno que permita que se comience ya con las excavaciones en el entorno del Mercado Central, para comprobar si realmente existen más restos arqueológicos de valor o no.

A su juicio, el retranqueo de 8 metros, tal y como indican los técnicos municipales que debe cumplir el proyecto de la empresa Aparcisa, no se sabrá si debe ser más o menos hasta que no se acometan las nuevas catas, por lo que los principales interesados urgen a que se inicien este tipo de actuaciones.

Diego Quiles, el presidente de los vendedores del mercado provisional, leyó ayer un manifiesto en el que, entre otras cuestiones, se volvía a hablar de «mentiras y excusas» del actual equipo de gobierno en este polémico asunto.

«Ya no son temas de patrimonio, ya no es que el aparcamiento esté o no en intramuros, ya no es que el edificio sea singular, racionalista y que éste haya de estar catalogado como emblemático, ya no es que esté el provisional en suelo ilegal... no. Ahora es que se incumplen un gran número de detalles técnicos», señalaban ayer en un comunicado estos vendedores.

Los mismos señalaron a su vez que la semana pasada se reunieron con el concejal de Urbanismo, José Manuel Sánchez, quien les trasladó, según afirmaron, que el proyecto podía seguir adelante siempre y cuando la empresa concesionaria resolviera las más de 50 deficiencias que los técnicos municipales han encontrado en la documentación presentada por la mercantil.

De hecho, José Manuel Sánchez insistió ayer en que se habían reunido a petición suya «para trasladarles toda la documentación que hasta ahora no habíamos tenido», refiriéndose a que se les expuso que en el acuerdo de adjudicación de diciembre de 2014 y previamente en el informe de julio de ese año los técnicos ya avisaban de qué tipo de subsanaciones se tenían que realizar en los proyectos para poder seguir adelante, es decir, «para mostrarles que no eran cuestiones nuevas» y que la empresa las conocía.

El concejal añadió además que algunas de las deficiencias detectadas por los técnicos impiden al proyecto de Aparcisa cumplir con el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y que «al menos» el retranqueo del edificio debe ser de 8 metros con respecto a lo propuesto por la concesionaria ante la proximidad a los baños árabes.

Ante esto, los placeros del mercado provisional exigen que se hagan esas catas para ver si realmente son 8 metros, o más o menos.

Precisamente, hoy, a las 20 horas, en la Plaça de Baix, los placeros han convocado una concentración de protesta por cómo está gestionando el ejecutivo el problema del Mercado Central.