«Vengo a dar explicaciones, todas las que sean necesarias a los ilicitanos y cuáles son los márgenes de maniobra». Así se presentó en Elche ayer el conseller de Hacienda, Vicente Soler, quien acudió a la ciudad para dar la cara y aclarar por qué la «situación es límite» en la Generalitat.
Soler, ante los medios de comunicación, quiso ser sobre todo sincero y claro. «No puedo comprometerme», indicó el titular de Hacienda preguntado por la posibilidad de que el próximo año el Consell aporte fondos importantes que reduzcan el déficit de financiación que mantiene desde hace años con el Ayuntamiento de Elche.
El caso es que la Generalitat debe más de 3 millones de euros al municipio ilicitano, según explicó Soler, quien puso en contexto la situación en la que se encuentras las arcas autonómicas.
Así por ejemplo explicó que el nuevo gobierno autonómico se ha encontrado con una «losa» de «más de 40.000 millones de euros». De hecho, dijo que es como si fuera la segunda conselleria, puesto que estas cifras sólo son superadas por la cartera de Sanidad mientras que la Educación sería la tercera de mayor presupuesto tras esa deuda.
Pero es que además dijo que se habían encontrado con que 1.600 millones de euros de ingresos no existen, y que el «invento» del fondo de liquidez autonómico (FLA) es una «estafa» porque es el Ministerio de Hacienda el que lo concede cuándo y en las condiciones que quiere.
Vicent Soler no achacó por su parte la deuda que ahoga a la Generalitat exclusivamente a la «mala gestión» de anteriores gobiernos del PP, sino que también asignó su parte culpa a la infrafinanciación por parte del Gobierno central, cuestión ésta que está llevando a responsables de la Generalitat a distintos municipios para explicar por qué se acaba de pedir manera conjunta por parte de empresariado, sindicatos, universidades y partidos los fondos que se merece esta Comunidad.
«Somos el 11% de la población de España y recibimos del estado apenas el 7%, sólo en cuanto a inversiones», afirmó el conseller, quien además apuntó que en este momento «el gasto por persona es de 150 euros por debajo de la media española».
«Tapar agujeros»
Vicent Soler también aseguró que aunque haya autonomía económica, el Gobierno es el que decide prácticamente todo y limita en un 1,8% el crecimiento del presupuesto en términos nominales.
Ante ello, el titular de Hacienda expresó que lo que está haciendo es «reordenar las prioridades y tapar los agujeros», insistió en que el «maltrato es histórico» a la Comunidad y que ha llegado el momento de «decir basta, dar un grito de revuelta, queremos dejar de ser simpáticos».
Tras exponer este contexto general, el conseller afirmó que «la empresa ilicitana necesita reconvertirse si quiere tener futuro», aseguró también que se le ponía «la piel de gallina» ante las necesidades sanitarias, educativas y servicios sociales en general, y que en el caso de Elche aseguró que precisamente en estas tres patas los ilicitanos «notarán la diferencia» el próximo año.
Por su parte, el alcalde, Carlos González, reivindicó ante el conseller que Elche «tiene importantes necesidades en materias de inversión que se han ido acumulando en los últimos 20 años», por lo que la localidad «necesita un esfuerzo inversor por parte de la Generalitat y una mejora de la fi El regidor ilicitano se refirió con ello a fondos para justicia, infraestructuras, educación o apoyo al sector productivo, entre otros asuntos.
