La comisaria María Jesús Bustos, que asumió el mando de la Comisaría de Elche a finales de mayo, alabó ayer «el trabajo diario para cumplir con el mandato de la Constitución Española de proteger el libre ejercicio de los derechos y libertades y garantizar la seguridad ciudadana». La comisaria subrayó que «la eficacia de la labor policial es el resultado de una tarea callada, del trabajo continuo, esforzado y muchas veces anónimo» y repasó la implicación de Seguridad Ciudadana (los «artífices de la prevención activa» junto a Policía Local) y de la policía de investigación a través de Policía Judicial, Información y Extranjería (por su respuesta a la «cada vez más sofisticada delincuencia») junto con Policía Científica.
La desarticulación de grupos criminales dedicados al tráfico de drogas, robos en establecimientos o domicilios y la lucha contra la lacra de la violencia de género ocupan a diario, dijo, a todos los miembros de la Policía Nacional de Elche, que a través de la prevención y la reacción han logrado reducir la tasa de criminalidad. Bustos destacó que las fiestas patronales transcurrieran en agosto sin incidentes de importancia gracias al potente dispositivo policial y reconoció de nuevo la complejidad del trabajo en Elche, con un entorno rural atomizado en más de treinta pedanías (algunas a cargo de Guardia Civil de Santa Pola) y con una actividad que la sitúa en el tercer puesto de la Comunidad en efectivos, en delitos y también en detenciones.
