El Servicio de Hemodinámica del Hospital del Vinalopó de Elche ha iniciado hoy su horario de atención las 24 horas del día, 7 días a la semana y se convierte en el único centro del sur de la provincia de Alicante que cuenta con este servicio de urgencias ininterrumpido para atender a pacientes con angina de pecho o infarto de miocardio.
Este nuevo servicio es una apuesta por ofrecer una asistencia más completa y cercana al ciudadano y así evitar el desplazamiento del paciente a Alicante ante un problema que requiere una atención inmediata, según han destacado desde el centro sanitario ilicitano.
El servicio cuenta con un equipo formado por 3 médicos especialistas en hemodinámica y 6 enfermeros con formación específica, que ofrecen al paciente una atención de la más alta calidad.
El centro apuesta por la introducción de técnicas de vanguardia que garanticen excelentes resultados terapéuticos de una patología que presenta una alta incidencia en la población.
La concejal del Sanidad del Ayuntamiento de Elche, Cristina Martínez, ha destacado durante su visita al centro que se trata de un "gran avance" que "facilita que se puedan salvar vidas", y ha añadido que seguirán reivindicando que cualquier paciente de Elche pueda ser atendido en esta unidad, incluso sin estar adscrito al Vinalopó, ya que el Hospital General no dispone de este servicio.
El servicio de hemodinámica se centra en el diagnóstico y tratamiento de la enfermedad coronaria pero también incluye el diagnóstico y tratamiento de un conjunto de procedimientos englobados bajo la denominación de cardiopatía estructural.
Los especialistas en hemodinámica se encargan del estudio anatómico y funcional del corazón para conocer su estado, además de la colocación de dispositivos para la resolución de problemas coronarios y valvulares.
Desde principios de año se han realizado más de mil cateterismos diagnósticos y alrededor 400 angioplastias, unas actividades que permiten realizar en el mismo acto la detección y el tratamiento de la enfermedad coronaria.
La técnica utilizada en una sala de hemodinámica, el cateterismo cardíaco, consiste en llegar hasta las arterias del corazón mediante un pequeño tubo, catéter, mediante anestesia local.
Si es posible el tratamiento, los especialistas introducen un "stent", una malla metálica montada sobre un pequeño "balón", con el que logran eliminar la obstrucción de la arteria, manteniendo su permeabilidad.
El perfil del paciente es el de una persona mayor de 65 años, varón y muy frecuentemente fumador, diabético o con antecedentes genéticos.
El 90% de los casos llegan vía urgencias (infartos de miocardio, anginas de pecho?) y el 10% restante es de carácter ambulatorio, derivado por el servicio de cardiología fundamentalmente.
