El conocimiento es una fuente de competitividad, tal y como destacan desde el Instituto de Biología Molecular y Celular (IBMC) de la Universidad Miguel Hernández, que está trabajando, en colaboración con el Parque Científico y Empresarial del mismo campus, en la elaboración de un máster de emprendedurismo en biotecnología que pretende dotar a los científicos de medios para que puedan implantar sus propias empresas en España y evitar, como sucede en la actualidad, que aumente la fuga de cerebros.
El director del Instituto de Biología Molecular y Celular, Antonio Ferrer, asegura que «los empresarios empiezan ahora a darse cuenta de que la biotecnología es un mercado emergente, y, después de la crisis del ladrillo, en una economía de mercado, el conocimiento es un fuente de competitividad».
No obstante, el investigador reconoció que «las universidades como fuentes de empleo van a estar cuestionadas en los próximos años, por lo que va a ser más complicado que los estudiantes que estamos formando puedan hacer carrera científica en ellas», por lo que añadió que «para aumentar la capacidad de transferencia estamos diseñando un máster de emprendeduría en biotecnología».
Antonio Ferrer explicó que «estamos formando a nuestros alumnos científicamente con unos grados de excelencia muy competitivos, pero los estamos formando sólo en una pata que demanda la sociedad, no los estamos formando en el desarrollo de sus proyectos». Una circunstancia que lleva a que muchos científicos acaben buscando acomodo en el extranjero.
Y es que Ferrer apuntó que «la ciencia debe ir más allá, y si uno no puede desarrollarse como científico en un laboratorio público, sí lo puede hacer en un laboratorio privado, y para eso hay que tener la formación, que haga al científico atractivo para una empresa privada, y, por otra parte, la formación que permita al científico desarrollar su propia empresa». Por eso, apuntó el director del IBMC, «con este máster en emprendeduría vamos a poner a los estudiantes enfrentados con la realidad social».
De esta forma, desde la UMH van a seguir insistiendo en algo que ya son pioneros, en la creación de empresas de base tecnológica.
Y es que la Universidad Miguel Hernández de Elche se sitúa en la actualidad como la primera universidad española en productividad en creación de empresas de base tecnológica a partir del trabajo de sus investigadores. Según el último informe publicado por el Observatorio IUNE, que analiza la actividad de I+D+i en las universidades españolas, la UMH destaca como la institución universitaria que más spin-offs ha impulsado en el último año contabilizado (2013), con un total de 2,36 empresas por cada 100 docentes.
En la actualidad, la UMH, a través de su Parque Científico y su incubadora y aceleradora de empresas, la Nau de la Innovació, mantiene activas un total de 22 empresas nacidas a partir de la transferencia de conocimientos de investigación universitaria.
