Los servicios de emergencias recibieron ayer a las 12 horas una llamada de alguien que alertaba de un incendio en una vivienda de la calle Mariano Benlliure de Elche. Dotaciones de Bomberos y de Policía Local se pusieron en marcha de forma inmediata pese a que las señas resultaban dudosas, y mientras tanto trataron de contactar con quien había llamado para concretar la información. Sin embargo, el teléfono resultó ser el de una mujer asturiana que nada sabía sobre un aviso al 112, y en la calle en cuestión no se detectó ningún fuego. Por ello, la investigación derivó rápidamente en localizar al «gracioso» que hizo la llamada, al que se ubicó en Santa Pola y que puede verse obligado a pagar los costes de la movilización de los efectivos.