El Partido Popular defendió ayer su gestión en el proyecto de rehabilitación del barrio de San Antón. El concejal del PP Vicente Granero aseguró que «las obras empezaron porque teníamos el compromiso de la Generalitat Valenciana y del Estado para hacer el proyecto». Además, el edil popular aseguró que «prueba de ello es que ambas administraciones tenían dinero en sus presupuestos para el barrio de San Antón».

Sobre la fecha del convenio que presentó esta semana el concejal de Urbanismo, José Manuel Sánchez, y que indica que el Ayuntamiento y la Generalitat firmaron el convenio para ejecutar el proyecto el 15 de mayo de 2015, medio año después de que arrancase la construcción del primer edificio, desde el PP explicaron que «se trata de un convenio que regula cómo se van a pagar las certificaciones y que hay que renovar cada año, por lo que no era indispensable tenerlo para empezar el proyecto».

De hecho, Vicente Granero indicó que «los convenio necesarios para empezar a rehabilitar el barrio son los que fijaron a Pimesa como agente urbanizador, y no el que indicó José Manuel Sánchez».

Por lo tanto, desde las filas del PP aseguraron que en ningún momento se puso en peligro la estabilidad económica del Ayuntamiento ni de Pimesa. Es más Vicente Granero aseguró que «fue el PSOE el que puso en peligro Pimesa con Alejandro Soler cuando la descapitalizaron asumiendo proyectos que no tenía que pagar la empresa pública».

Finalmente, Granero volvió a mostrar su preocupación por la posibilidad de que la Generalitat utilice el dinero que, según el PP, tiene presupuestado para el proyecto de rehabilitación de San Antón en otras ciudades.