El desprendimiento de parte del techo de una vivienda del barrio de San Antón obligó ayer a efectivos de Policía Local y Bomberos a desplazarse al edificio, ubicado en la calle Boniol, para revisar el estado de la estructura y descartar riesgos después de que se desprendiera parte de la escayola sobre una habitación de la cuarta planta. Técnicos municipales consideran, y así se lo hicieron llegar a los residentes, que la caída de parte del techo en la estancia se debe a un «mal mantenimiento por parte de la comunidad de vecinos», por lo que sería la aseguradora del edificio la que tendría que responder por los daños.

Sin embargo, algunos vecinos plantean que el edificio carece de un refuerzo entre el falso techo y el tejado -relleno sólo de cañas- y que, además, existen huecos por los que se cuelan palomas que poco a poco han ido generando un peso excesivo de excrementos y cadáveres acumulados de aves.

Riesgos

Una dotación del parque comarcal de Bomberos Elche fue requerida por la tarde en la vivienda para inspeccionarla y eliminar el riesgo de nuevos desprendimientos, saneando parcialmente el agujero del techo. Según los vecinos, esta no sería la única vivienda afectada y que podría correr riesgo de desplome, pues el problema se podría extender a todo el bloque debido a deficiencias en la construcción o el estado del mismo. La falta de rejas que impidan el paso a las palomas y demás aves podría ser, según los técnicos, parte del problema. «Los excrementos se han acumulado hasta romper el cañizo, y después, el techo del dormitorio» afirmó el perito.

Además, el problema se extiende al salón, donde han podido observar los primeros síntomas de desplome, desde grietas a una deformidad en el techo que, según el técnico, pronostica su caída inminente.

El techo cedió el pasado viernes, y no fue hasta el sábado cuando la familia afectada se puso en contacto con los técnicos. Siguiendo el consejo del técnico, la familia que reside en el piso se trasladará a pasar la noche a un hotel debido al riesgo de caída de fragmentos de material en el resto de habitaciones de la casa.

Los vecinos del bloque se mostraron ayer asustados y reiteraron que esta no es la única vivienda afectada y con riesgo de desprendimiento. De hecho, otra casa de la misma planta mostraba síntomas de un hundimiento similar.