Una empresa, con sede en Elche, ha facturado cerca de 15 millones de euros la última temporada tras patentar un sistema de doble suspensión que mejora la seguridad y la conducción de la bicicleta en montaña.

La compañía ilicitana Mondraker ha apostado por la tecnología y la innovación para hacerse un hueco entre las bicicletas de gama media-alta dentro de una actividad que cada vez más personas practican en España y todo el mundo.

El director ejecutivo, Miguel Pina, explicó que «la facturación es consecuencia de un intenso trabajo de investigación, tecnología aplicada y patentes propias, lo que se traduce en que en 2016 tenemos previsto contar con 68 modelos diferentes que oscilan entre los 499 y los 9.000 euros».

Mondraker -nombre en honor al Mago Mandrake que aparece en un cómic de Spiderman- nació en 1992 como distribuidora de bicicletas «Teambike» y en 2001 pasó a ser una marca independiente, lo que coincidió con su primera gama de bicicletas.

Mondraker ha patentado su diseño geométrico de las bicicletas, distintas a las de la competencia para asemejarse a las de las motos de motocross, lo que hace que se conduzcan de forma diferente.

En 2016, un nuevo producto viene pisando fuerte y Mondraker también apuesta por ello, las bicis eléctricas, pero no sólo para uso urbano como movilidad sostenible -que en Europa ya es el presente- sino para ir a la montaña, con pedaleo asistido.

Para el próximo año, la previsión de esta empresa con 51 trabajadores es crecer un 25 por ciento, principalmente, en los mercados internacionales.