El nuevo gobierno de Elche está dando traslado al Congreso de los Diputados de la situación del hotel de Arenales del Sol. Hasta Madrid se está haciendo llegar la preocupación que en en el municipio existe con respecto al devenir de este inmueble en estado ruinoso que desde hace décadas permanece en el olvido en primera línea de playa.
El diputado nacional, Santiago Martínez, a instancias de la concejala de Turismo, Playas y Pedanías, Cristina Martínez, está siendo la persona que, actualmente, está canalizando esta inquietud que no sólo interesa a los residentes de la mencionada zona turística, sino a muchos turistas y visitantes.
En concreto, y de acuerdo a las inquietudes formuladas por la edil ilicitana, Santiago Martínez ha remitido al Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente una serie de preguntas para que sean respondidas por escrito acerca de este polémico edificio.
Así por ejemplo, se solicita al Gobierno información sobre el estado en que se encuentra la concesión de licencias por parte de la Dirección General de Costas para la rehabilitación del hotel. De igual modo, el diputado por la provincia de Alicante también requiere, con escrito presentado el pasado jueves, conocer cuál es la postura de la Dirección General de Costas respecto a la posibilidad de rehabilitar el mencionado inmueble.
La concejala Cristina Martínez se muestra muy interesada en buscar una salida definitiva a este edificio, una auténtica mole de ladrillo y hormigón que afea el litoral dado su lamentable estado.
En términos similares, el alcalde de Elche, Carlos González, también se refirió recientemente a esta construcción en el sentido de que o bien se ha rehabilitaba o bien se demolía definitivamente, acciones ambas lo antes posible.
El Ayuntamiento de Elche concedió la correspondiente licencia de reforma y rehabilitación del hotel condicionada siempre al visto bueno de la Dirección General de Costas ante la duda de la existencia de un sótano que no figuraba en los planos que obran en poder del Estado.
Por sorpresa, se emitió un informe negativo por cuanto se negaba dicha autorización alegando que se pretendía aumentar la edificabilidad del inmueble. Ni siquiera se daba la opción a subsanar deficiencias al trámite. Costas dudaba de la existencia de dicho sótano.
La mercantil encargada de la rehabilitación, la cadena Princesol, que contó con el apoyo del anterior equipo de gobierno del PP, a principios de 2015 se desplazó junto con el entonces edil de Urbanismo, Vicente Granero, hasta Madrid para mantener una reunión con la Dirección General de Costas. En ese encuentro el ministerio planteó su duda sobre la existencia del sótano. Tanto la empresa como el Consistorio de Elche sostuvieron que sí que existe, pese a que el efecto del tiempo y los temporales de levante lo han acabado ocultando.
Con el fin de sortear las dudas, la mercantil procedió a realizar una serie de catas que demostraron que dicha planta sótano existía.
El resultado de las catas se trasladó a un informe que fue remitido al Ministerio de Medio Ambiente, con la intención de que se pudiera desbloquear la negativa inicial y que se avalase así la licencia de obras que ya concedió el Consistorio ilicitano para la rehabilitación a la empresa.
El concejal de Infraestructuras explicó en su día que «paradójicamente el sótano del edificio no estaba en la documentación que tiene el Ministerio, por lo que se pidió a la empresa que lo acreditase ya que se trata de un proyecto de rehabilitación, no de nueva construcción». En este sentido, el edil apuntó que «lo que se va a autorizar desde la Administración es que se rehabilite el inmueble existente, ya que no se puede hacer nada nuevo».
Hasta la fecha de hoy , Costas no ha dado respuesta, de ahí que la concejala de Ilicitanos por Elche ha decidido dar un impulso definitivo para conocer la situación actual de dicha tramitación y poder resolver, de una vez por todas, una de las necesidades más reivindicadas y necesitadas por los ilicitanos en su zona costera.
