El Gobierno ha creado administrativamente la nueva Oficina Local de Tráfico en Elche, un edificio que centralizará el 40% de los trámites que actualmente se realizan en Alicante para el sur de la provincia. Esa oficina tiene ahora entidad sobre el papel y también físicamente, puesto que el edificio está acabado desde hace cuatro años, pero sigue cerrada. Y es que no se ha dado fecha oficial de apertura ni se han concretado los medios humanos y técnicos con los que tiene que comenzar a rodar, y eso que la apertura se ha anunciado repetidamente desde hace años sin que, hasta ahora, se haya cumplido. El último anuncio lo hizo el jefe provincial de Tráfico, Francisco García-Caro García, quien el pasado mes de mayo anunció que la intención de la Dirección General de Tráfico era abrir antes de las elecciones generales, después del verano.
Tal y como adelantó, antes de la apertura «de facto» de la oficina debía crearse en el BOE, algo que se cumplió en la publicación del sábado. En ese anuncio se concreta que la oficina ilicitana estará integrada en la estructura orgánica de la Jefatura Provincial de Tráfico de Alicante, de la que dependerá funcionalmente. El resto del anuncio es inconcreto: Al frente habrá un jefe de oficina local, «que tendrá el nivel orgánico que disponga la relación de puestos de trabajo», y contará con «los medios materiales adecuados» y con «los medios personales que se determinen». En cuanto a su puesta en funcionamiento, la fecha «será determinada por el Ministerio del Interior».
Los ciudadanos de la provincia podrán dirigirse indistintamente a la sede de Alicante o a la de Elche, donde se prevé que se realicen el 40% de las gestiones que actualmente se centralizan en la capital. De ese modo, se cumplirá con el objetivo de «potenciar la cercanía al ciudadano» de Elche pero también del resto de la comarcal el Baix Vinalopó, la Vega Baja, y localidades como Elda, Petrer, Monforte, Novelda o Villena.
El inmueble -ubicado en la calle Fuensalida, junto a la carretera de Crevillent- tiene 3.200 metros cuadrados distribuidos en tres plantas y un ático. Fue adquirido por la Dirección General de Tráfico en 2006, se sometió a una reforma y se anunció inicialmente que abriría en junio 2010, aunque la fecha se ha ido posponiendo sucesivamente.
