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A Pie de Calle

El picudo campa a sus anchas

El devastador insecto ha pasado a formar parte del entorno de los huertos y zonas rurales ilicitanas

Decenas de picudos muertos junto a una de las trampas con feromonas. INFORMACIÓN

Negar la evidencia no es la mejor fórmula para solucionar un problema. Así lo considera el nuevo concejal de Sostenibilidad Ambiental, Antonio García, quien lamenta la política de opacidad realizada en los últimos cuatro años por el PP para intentar ocultar la situación real de los huertos ilicitanos.

«Hemos solicitado a los técnicos un diagnóstico que nos permita conocer cual es la situación real y, nos tememos que no es la que nos contaban desde el PP», explicaba Antonio García.

La realidad es que en las zonas rurales de Elche, e incluso en el casco urbano, es fácil encontrar a este devastador insecto volando como si formara parte de entorno.

«Para esta concejalía la prioridad es controlar la plaga del picudo, ya que somos conscientes de que erradicarla es prácticamente imposible», apunta el edil de Compromís.

Antonio García ha convocado para el próximo día 9 la mesa técnica del picudo en el que se sentarán técnicos de Sanidad Vegetal de la conselleria, técnicos del Ayuntamiento y Tragsa.

«Tras conocer la situación real, la daremos a conocer. Pensamos que es vital para los ilicitanos conocer el estado real del Palmeral para, además, concienciarles de la importancia de su conservación. El siguiente paso sería actuar, y para ello queremos conocer de primera mano qué tratamientos de los aplicados hasta el momento han sido efectivos y cuáles no», indica el responsable de medio ambiente.

«Nosotros preferimos apostar por la lucha biológica, pero si la lucha química es efectiva y no tiene muchos efectos secundarios, habrá que estudiar una actuación conjunta», añade.

Huertos urbanos

Compromís apuesta también por la creación de huertos urbanos. «Sería muy importante mejorar el cuidado de los huertos como una fórmula para su conservación y para que no se vean afectados por el picudo», apunta Antonio García, quien añade que «aunque no es fácil, sería positivo trasladar a otras zonas el modelo del Huerto de la Cuerna».

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