Sorpresa, satisfacción, sonrisas y abrazos... muchos abrazos, se adueñaron anoche de la sede de Compromís per Elx después de conocer que la jornada electoral situaba a la agrupación que lidera Mireia Mollà como tercera fuerza política en el Ayuntamiento de Elche. «Esta noche ha dejado de existir el autoritarismo en el Ayuntamiento de Elche. Los ciudadanos han hablado y a partir de ahora vamos a trabajar porque el gobierno municipal sea una herramienta útil, para que las administraciones no sean un enemigo de los ciudadanos, que no se les atropelle, que se sepan oir las necesidades y la voz de los ilicitanos».

Mollà, rodeada del equipo de campaña que ha permitido que Compromís -que no tenía representación- entre con fuerza en el Ayuntamiento, aseguró que los resultados electorales muestran que «los ilicitanos no han revalidado las políticas del Partido Popular. Por eso, nosotros vamos a reconciliar a los ciudadanos con la democracia. Hoy no acaba la crisis económica ni la social, pero a partir de ahora hay que trabajar para hacer otra forma de política: participativa y abierta».

Respecto a la necesidad de establecer pactos para poder formar gobierno en el Consistorio local, Mireia Mollà se congratuló del panorama plural que ha dejado las urnas. «No nos asusta, porque un gobierno debe de representar a alguien más que a uno mismo. La política no es aritmética, sino la representación de todos los ciudadanos. Por ello es necesario pactar y poner en marcha una nueva política que sirva para rescatar personas, que diseñe un modelo de ciudad, que nos permita ser los protagonistas de la salida de Elche y de la Comunidad Valenciana de la crisis».

La candidata de Compromís remarcó que el resultado de los comicios en la ciudad demuestra que «el PP no ha admitido que se estaba equivocando, a pesar de que eran muchos los que se lo decían. No han aprendido y ahora tienen el reto de admitir y de cambiar el rumbo de sus políticas».

Mollà se mostró dispuesta a dar su apoyo a las fuerzas de izquierdas que han recibido el respaldo de los ilicitanos. «La gobernabilidad es posible si hay voluntad. Será complicado, seguro que más complicado que cuando en un gobierno se instala el ordeno y mando. Va a ser más costoso, pero eso garantizará representar a alguien más que a uno mismo. Habrá que buscar visiones conjuntas y a mí no me asusta la pluralidad. De hecho, estoy contenta porque se va a dibujar un panorama nuevo y positivo. La verdad es que estoy muy contenta y felicito a las demás fuerzas que también buscaban un Ayuntamiento mejor para todos los ilicitanos».