Los agentes sociales siguen enmendando la plana al Gobierno y a todos aquellos que día a día anuncian a bombo y platillo que la economía está dejando atrás la crisis económica y que así lo atestiguan los datos macroeconómicos. Una de las cifras que ponen en evidencia que la recuperación no ha llegado a todas las capas de la sociedad es que el índice de cobertura para los parados se ha reducido un 25% en los últimos tres años en la provincia, una tasa que incluso es mayor en la comarca del Baix Vinalopó.
Según los datos analizados por Comisiones Obreras en relación a las cifras del Servef, «en el Baix Vinalopó, el dato de cobertura es del 42,77 % y, por lo tanto, el 57,23% no percibe ninguna prestación. Eso significa que de las 39.000 personas que hay desempleadas, sólo algo más del 42% recibe alguna prestación», indicó Martín Carpena, secretario general de CC OO en Vinalopó-Vega Baja, quien especificó que entre los parados que reciben alguna prestación después de haber terminado su contrato sólo el 30,78% tiene una prestación contributiva, mientras que el subsidio es recibido por el 50,77% y la renta activa de inserción por el 18,46%.
Según Carpena, estos datos se traducen «en unas cifras extremadamente preocupantes, y esto es motivado por la precariedad laboral. A nivel de la provincia de Alicante, por poner un dato, en febrero de 2012, había 123.400 personas que tenían alguna prestación mientras que en este mismo mes de 2015, la cifra se sitúa en 92.911. Es decir, en tan sólo dos años ha bajado la cobertura en más de 30.000 personas y eso se traduce en que alrededor de un 25% menos perciben prestaciones».
Pero además, desde Comisiones Obreras se alerta de que «si seguimos analizando los datos, vemos que mientras en la provincia de Alicante de media hay una tasa de cobertura del 45,51%, en el Baix Vinalopó la cifra es del 42,77% alrededor de un 3% menos, sin perder de vista el hecho de que la provincia ya se encuentra de por sí a once puntos por debajo de la media nacional».
Los representantes sindicales advierten que esta situación obedece única y exclusivamente a la fragilidad del mercado de trabajo. «Si de las 39.000 personas que hay desempleadas en Elche, Santa Pola y Crevillent sólo 4.908 recibe una prestación contributiva es porque la duración de los contratos está impidiendo a los trabajadores generar las suficientes cotizaciones para cobrar cuando se produce el cese de la relación contractual», indicó Carpena.
Los datos, además, ponen el acento en los problemas que esta situación provocará en el futuro de cara a las pensiones. «La pregunta es si el 57% de los parados no recibe prestación alguna, ¿de qué viven? Pues la respuesta es, en unos casos, de la red familiar y en otros muchos, de la economía sumergida que antes se extendía fundamentalmente al sector del calzado pero que ahora está generalizada en el mercado laboral y que provoca que, por ejemplo, se hagan contratos de tres horas a los trabajadores y que estos realicen jornadas de ocho horas sin dar de alta», aseguró Carpena.
Desde Comisiones Obreras se aseguró que, además, «la reforma de la ley de la Seguridad Social ha tenido una incidencia directa en las prestaciones que cobraban los mayores de 52 años y que ahora se ha retrasado hasta los 55», dijo Carpena, quien aseveró que «si no se reactiva la economía de los salarios difícilmente se puede estimular el consumo e, indirectamente, generar nuevos puestos de trabajo».
