La llegada de las fiestas navideñas y la difícil situación económica por la que atraviesan miles de familias ilicitanas hacen que estos días del año las muestras de solidaridad se multipliquen. Prueba de ello es el aspecto que presentan las instalaciones de Cáritas Elche, donde se acumulan toneladas de alimentos y productos de primera necesidad aportados por numerosas empresas de la ciudad.
«Somos una empresa de Elche y estamos comprometidos con la ciudad y los ilicitanos, por eso, como cada año, donamos a Cáritas palés de alimentos para ayudar a las personas que están atravesando dificultades», explica el director de relaciones públicas de la firma Calzados Thor.
Los miles de kilos de aceite, leche, arroz, tomate.... donados por esta empresa han ayudado a mantener estos días el almacén de Cáritas repleto. Allí, los voluntarios de la organización preparan los miles de lotes que son repartidos a las parroquias de la ciudad. Desde allí se distribuyen a las personas más necesitadas.
«Nos encontramos en una época en la que la gente se muestra más sensible a los problemas de los demás», explica el coordinador de Cáritas Elche, Javier Rovira, quien añade que «estamos muy agradecidos por cómo las empresas y particulares hacen un esfuerzo para aportar todo cuanto pueden. Toda la colaboración es bienvenida, pero también es cierto que en estos momentos la principal necesidad de nuestros usuarios no es de alimentos, sino de trabajo».
Rovira recuerda que «el trabajo dignifica y las personas, más allá de un plato de comida, algo que, insisto, agradecen enormemente, pero lo que quieren es un empleo que les permita pagar las facturas de agua y luz de sus hogares y sacar a sus familias adelante. Ellos prefieren trabajar y ganarse con su esfuerzo el plato de comida antes que recibirlo por caridad».
En este aspecto, el coordinador de Cáritas reclama más «implicación» de las instituciones públicas y privadas. «Es cierto que colaboran con nosotros, pero creemos que hay que trabajar en la línea de dar oportunidades a las personas que las están reclamando».
Inicio de una colaboración
Según Rovira, la importancia de las aportaciones que realizan las empresas ilicitanas va más allá de la donación de alimentos.
«El hecho de que una empresa haga una entrega de alimentos de primera necesidad nos permite establecer un contacto con ella y concretar posibles líneas de colaboración en el futuro. Es decir, los alimentos son muy bienvenidos, pero aprovechamos para sensibilizar a los empresarios y decirles que si tienen la oportunidad de emplear a alguno de nuestros usuarios, pues mucho mejor». Rovira puntualiza que «hay que recordar que es responsabilidad de la Administración generar empleo para sacar a estas familias del lugar en el que desgraciadamente se encuentran».
Gestos emotivos
El responsable de Cáritas apunta que no sólo son los empresarios de la ciudad quienes estos días se vuelcan con los más desfavorecidos. «Es muy emotivo comprobar cómo hay señoras pensionistas que se pasan todo el año ahorrando con esfuerzo para llegadas estas fechas entregarnos un cheque con mil o dos mil euros. Recuerdo que había una maestra jubilada que cada año nos entregaba 6.000 euros al llegar la Navidad».
