El concejal Luis Ángel Mateo admitió ayer haber votado favorablemente tanto en el pleno del mes de julio como en el de octubre el expediente de urbanización de un sector de Peña de las Águilas en el que varios miembros de su familia cuentan con una gran cantidad de terrenos. Mateo argumentó que cuando este expediente se presentó en la comisión de Urbanismo del mes de julio se ausentó de la reunión al desconocer si su presencia vulneraba algún precepto. «Cuando este tema se iba a llevar al pleno por primera vez lo consulté con el secretario del Ayuntamiento, quien verbalmente me aseguró que a su entender no tenía porqué ausentarme de las votaciones al tratarse de la aprobación de las bases para el desarrollo de un sector que venía ya contemplado en el Plan General. Por eso en el pleno de julio voté a favor y lo volví a hacer en el de octubre, aunque realmente no tenía ni idea que ese punto se iba a plantear en la sesión. Sólo lo sabía la alcaldesa y sus más próximos y por eso no me levanté del salón de plenos y voté a favor».
De hecho, el expediente de urbanización de ese sector de Peña de las Águilas no pudo salir adelante en el pleno de julio al votar en contra toda la oposición en pleno. Casualmente, la alcaldesa decidió en la sesión de octubre presentar «por sorpresa» una moción «in voce» respecto a este expediente aprovechando que la concejal del grupo de no adscritos, Cristina Martínez, no asistió a la reunión por motivos profesionales y que había un empate técnico entre el grupo municipal del PP y los ediles de la oposición. Por ello, Mercedes Alonso logró sacar partido de esta ausencia y aprobar el expediente empleando su voto de calidad. Efectivamente, no sólo el PSOE y el Partido de Elche se sorprendieron de la «estrategia» de la alcaldesa para sacar adelante un tema que inicialmente no era urgente, sino que incluso algunos miembros del propio equipo de Gobierno confesaron su sorpresa por la presentación de una moción de la que nada se había hablado en la reunión previa al pleno.
Mateo explicó que los terrenos que su familia tiene en Peña de las Águilas, concretamente en un terreno situado en el polígono 1 de la pedanía (identificados con la unidad de ejecución L), en el que hay una casa de labor, una vivienda unifamiliar y un local (según consta en el Registro de la Propiedad), eran propiedad de su abuelo «y por ello mi padre tiene no sólo esa escritura, sino otras más en las que no hay edificaciones, al igual que otros familiares míos».
El concejal de Empresa y Empleo insistió en que el expediente «es del año de María Castaña que estaba paralizado desde el año 96 y que ahora ha salido como otros muchos. El urbanizador presentó en el Ayuntamiento un proyecto para desarrollar el suelo y nos obligó a los propietarios a tener que iniciar los trámites para la urbanización. Yo estaba convencido de que era un trámite más y, además, contaba con la ratificación del secretario respecto a que no había ningún problema porque votara sobre este expediente. En cualquier caso, no ha habido ninguna modificación del Plan General ni se ha variado la edificabilidad de la zona».
Según el catastro, la parcela donde están las tres edificaciones tiene una superficie de casi 15.000 metros cuadrados y un espacio construido de casi mil metros en una parcela sin división horizontal.
Expertos en urbanismo aseguraron que el expediente que se ha aprobado permitirá aumentar el número de parcelas disponibles en el sector y por lo tanto el número de solares en los que se podrá construir. El trámite siguiente será aprobar la reparcelación del suelo parque el terreno deje de ser urbano (calificación actual) y se convierta en urbanizable.
