«Seguramente ninguno de los 20.000 regantes se ha enterado o lo ha notado, porque en ningún momento se han quedado sin suministro de riego, ni un minuto». Así lo aseguraban ayer fuentes de Riegos de Levante tras emitir un comunicado en el que informaban que el pasado domingo se detectó una rotura en el canal de Poniente del trasvase Tajo-Segura en su margen derecha. En concreto, en su punto kilométrico 15, a la altura de Albatera.
Este desperfecto, debido a que la zona es muy densa en yesos y la pertinaz sequía hace que éstos se compriman, alterando así una de las paredes del canal, con lo que las filtraciones iban en aumento, obligó a Riegos de Levante a cortar el domingo por la tarde el suministro de agua de riego para estas decenas de miles de agricultores que trabajan el campo entre Mutxamel y Orihuela.
«Esta rotura ha afectado a prácticamente la totalidad de la Comunidad General de Regantes de Riegos de Levante, con única excepción de los regantes de la primera toma de la comunidad de base de La Murada» (una pedanía oriolana), según se señala en el comunicado.
Según la entidad de riego, para que los agricultores pudieran seguir regando si así lo necesitaban, se dieron las instrucciones necesarias para que el suministro en su defecto procediera, mientras se prolongaban las reparaciones, del embalse de Crevillent.
«Se ha podido atender toda la demanda gracias al agua que se ha acumulado estos meses en el embalse de Crevillent para prevenir este tipo de imprevistos. Se prevé que el próximo jueves -por hoy-, si no existen complicaciones, se pueda reanudar el servicio» con la toma del trasvase del Tajo-Segura, el cual tiene dos canales: uno el de Poniente, que se dirige hacia Cartagena, y el de Levante, que es el que ha sufrido estos desperfectos, según siempre las mismas fuentes.
La rotura se ha registrado en un tramo de la conducción donde el agua circula al aire libre, junto a una carretera, y para los que habitualmente pasan por el lugar les ha llamado la atención estos días que esta conducción estuviera seca.
«Entra dentro de lo previsible y de lo normal», señalaron desde Riegos de Levante, que además quisieron felicitar la «gestión inmediata de la Confederación Hidrográfica del Segura, de sus técnicos y en especial de Salvador Cerezo», así como del ingeniero de caminos de Riegos de Levante, José Pagés, y de sus trabajadores por su «pronta y diligente actuación en unos momentos tan delicados».
