El pleno municipal en el Ayuntamiento de Elche más esperado de los últimos años no está defraudando. Antes de las 10 horas, cuando arrancaba la sesión, había colas para entrar, de manera que el salón de plenos ha amanecido lleno, con gente de pie.
Algunas caras de concejales del PP, incluida la alcaldesa, Mercedes Alonso, estaban más serias de lo habitual, sobre todo después de que Cristina Martínez, la exedil del PP que ha pasado a ingresar en el grupo municipal de no adscritos, hiciera acto de presencia con la sesión ya comenzada.
El nuevo asiento de la edil ya no está en la bancada popular, sino en una esquina en la parte opuesta, junto a la edil socialista Leonor Antón.
A las 11.30 la alcaldesa ordenó un receso de media hora para estudiar una moción de urgencia presentada por el PSOE sobre el tema de los desahucios. Hasta entonces el pleno se había desarrollado con algunos rifirrafes entre PP y Cristina Martínez, y Jesús Pareja (Partido de Elche) y el público asistente, y por primera vez en esta legislatura los populares han visto cómo dos puntos, relativos a Urbanismo -un tema de un vial cerca de la urbanización de Bonavista y la licitación para la urbanización de un sector en Peña de las Águilas-, no han podido salir adelante al oponerse Martínez, PSOE y Partido de Elche.
La polémica con la inversión destinada al parque móvil , la aprobación del último trámite para la reurbanización de San Antón y que la alcaldesa haya llamado «tránsfuga no adscrita» a Cristina Martínez, que sigue siendo concejala de Sanidad y Consumo, están marcando, entre otros asuntos, la sesión por ahora.
