Los experimentos con gaseosa. La mayoría de los directores de los institutos ilicitanos han hecho suya la recurrida frase para denunciar el fracaso que ha supuesto el adelanto de los exámenes de recuperación de ESO, Bachillerato y Ciclos Formativos, de septiembre a julio.
Una experiencia que se ha llevado a cabo por primera vez este curso en la Comunidad Valenciana después de que la conselleria de Educación decidiera que sería una buena medida para luchar contra el fracaso escolar.
El tiempo y las notas han dado la razón a los alumnos que ya en su día denunciaron que los exámenes les irían mal por no haber tenido apenas tiempo para estudiar. Cabe recordar que desde que acabó el curso hasta que se iniciaron los exámenes transcurrieron poco más de dos semanas.
En ninguno de los institutos ilicitanos consultados por este diario han mejorado los resultados respecto a convocatorias anteriores. En muchos de ellos los resultados han sido ligeramente peores, en otros, el número de suspensos ha sido el doble que en anteriores convocatorias.
«Los resultados han sido bastante peores que en las convocatorias de septiembre. A muy pocos alumnos les ha servido esta convocatoria para recuperar asignaturas», explicaba Félix Árias, director del Instituto La Asunción quien añadía que ha habido cerca de un cincuenta por ciento más de suspensos.
Para el director de este instituto «no tiene sentido que Educación adelante los exámenes de septiembre a julio, más aún cuando en otras comunidades como Cataluña y Andalucía han dado marcha atrás por los malos resultados y han vuelto a realizarlos después de las vacaciones estivales».
Los mejores resultados han sido para los alumnos que sólo tenían una o dos asignaturas para recuperar, por contra, los que tenían tres o más asignaturas no han logrado recuperar y muchos de ellos deberán repetir curso.
«En general, la percepción entre el profesorado es que ha habido más suspensos», afirmaba Pepa Fos, directora del Instituto Victoria Kent.
Por su parte, Toñi Lledó, directora del Instituto Carrús, señalaba que «los resultados han sido bastante más flojos que en septiembre. Los resultados de las notas confirman lo que nos temíamos desde el profesorado. Los alumnos no han tenido tiempo suficiente para estudiar».
«Creo que hay alumnos que con más tiempo para estudiar podrían haber aprobado más asignaturas y pasar de curso», señalaba Juan de Dios González, director del IES Pere Ibarra. En el mismo sentido se pronunciaba Alfred García, director del Instituto Sixto Marco, quien puntualizaba que «quizás el año que viene, con más tiempo para estudiar los resultados puedan mejorar. La realidad es que este año los exámenes no han ido bien».
«Nuestros resultados han sido similares a los de años anteriores, pero sí que es cierto que entre el profesorado hay coincidencia en que no tiene sentido adelantar la convocatoria de septiembre a julio. En 15 días los alumnos no pueden estudiar lo que no han estudiado en todo el curso», indicaba Emilia Parra, directora del Instituto Joanot Martorell.
Por otra parte, los docentes recordaban que el adelanto de los exámenes de recuperación a julio ha causado «daños colaterales» para las academias de estudio que se han quedado sin alumnos este verano e incluso para el turismo, ya que muchas familias se han visto obligadas a retrasar sus vacaciones por los exámenes de los estudiantes.
