La patronal y los sindicatos del calzado llegaron ayer a un nuevo acuerdo «in extremis» y la huelga programada para los días 24, 25 y 31 de julio queda de momento desconvocada.

El Servicio Interconfidencial de Medición y Arbitraje (SIMA) reunió ayer en Madrid a los representantes de UGT y CC OO con las patronales de calzado FICE (Federación de Industrias del Calzado Español) y AEC (Asociación Española de Empresas de Componentes para el Calzado) que expusieron sus diferentes puntos de vista sobre si mantener o no la cláusula de revisión salarial en el convenio 2014/15.

«Finalmente, ambas partes acordaron mantener esta cláusula con el compromiso de que, al comienzo de la negociación del siguiente convenio en el año 2016, se tenga en cuenta la situación económica del país y los acuerdos de negociación colectiva confederales vigentes en el estudio del contenido de dicha cláusula», según informaron ayer en un comunicado conjunto tanto FICE como AEC.

«Por fin ha imperado el sentido común y estamos orgullosos de haber ejercido esta presión con el objetivo de proteger los derechos de los trabajadores», expuso José Torregrosa, representante de CC OO., en una primera valoración,

Desde UGT, Juan Antonio Maciá señaló que«los empresarios no han podido, no se puede modificar un convenio por un decreto».

Así, recalcó que pese a que la huelga se desconvoca, la asamblea programada para el próximo lunes día 21 en Elche sigue vigente.

En esta reunión, se explicará a los delegados sindicales y a todos los trabajadores que deseen acudir a la misma, las razones por las que no se ha firmado el convenio hasta la fecha, así como las medidas de presión planteadas.

Por su parte, José Sanchís presidente de la patronal FICE, señaló que los sindicatos no miran por el bien de los obreros sino por el suyo propio. «No se dan cuenta de que los trabajadores no funcionan a través de los convenios, lo hacen de acuerdo con los empresarios», sostuvo Sanchís.

El problema entre sindicatos y patronales comenzó hace unas semanas cuando CC OO y UGT anunciaron que se iba a llevar a cabo una huelga en el sector del calzado a nivel nacional a finales de julio, ya que no estaban de acuerdo con algunos puntos que se exponían en el convenio colectivo del sector, y que se tenía que haber firmado el pasado 11 de julio.

Por ello Torregrosa señaló que no habían firmado porque los sindicatos se sentían engañados ya que la patronal no había tenido en cuenta la cláusula de revisión salarial, un punto que, según las centrales sindicales, indica que si transcurrido el año 2014 el IPC supera el 2%, se deberá llevar a cabo una revisión salarial en lo que rebase esa cifra.

Una vez más los sindicatos habían amenazado con organizar una huelga. La primera vez se produjo hace unos meses por discrepancias en torno al incremento salarial. Finalmente, ante las presiones, los empresarios aceptaron la subida del 1% que los sindicatos pedían. La segunda fue hace unos días

Con esta actitud, según José Sanchís, «lo único que consiguen los sindicalistas es presionar a los trabajadores, cosa que no beneficia en nada al sector». «Los obreros sólo quieren trabajar, no quieren que les presionen», expuso Sanchís, quien además afirmó que «los empresarios son la gente seria de verdad».