Elche, la tercera ciudad de la Comunidad Valenciana y donde el PP gobernaba cómodamente, a tenor de la crisis interna que sobre todo desde Semana Santa arrastra el principal grupo de la oposición, el PSOE, ha visto cómo en apenas dos semanas la estabilidad municipal ha pasado de ser una realidad a un deseo.

Su concejala de Sanidad, Cristina Martínez, presentó ayer a las 12.06 horas ante el secretario del Ayuntamiento su renuncia a seguir siendo edil del PP,Cristina Martínez por lo que se daba pie así a la creación del grupo de no adscritos.

«Solicito que dado que no deseo seguir perteneciendo al grupo popular de "este Ayuntamiento" como adscrita al Partido Popular, se me asigne al grupo no adscrito, es decir, a ningún partido», según se recoge en el escrito, el cual concluye señalando que abandona el equipo de gobierno «por razones de ética dado lo acontecido».

La edil popular Cristina Martínez, que el pasado 30 de junio, durante el pleno, dejó claro su desencuentro no sólo con la alcaldesa, Mercedes Alonso, sino también con el responsable del Hospital General de Elche y con el conseller de Sanidad, Manuel Llombart,Mercedes AlonsoManuel Llombart por la política sanitaria que se estaba aplicando en la ciudad, dio ayer el paso que se esperaba y que compromete al equipo de gobierno popular que pierde así la mayoría absoluta.

De hecho, la alarma que ha saltado en Elche se ha dejado sentir en el PP de la provincia y de la Comunidad Valenciana. En este sentido José Císcar, vicepresidente del Consell y presidente de los populares en la provincia, mantuvo ayer una reunión con Mercedes Alonso para abordar precisamente la situación generada a raíz del comportamiento de Martínez.

La reunión estaba prevista de antemano, pero coincidió con la salida ayer de la edil del grupo municipal del PP. Según pudo saber este diario de fuentes del PP, el partido no cree que «la sangre llegue al río», es decir, que Alonso podrá agotar el mandato municipal, aunque sí hay una cierta preocupación porque es conocido que hay «diferencias de criterio» dentro del equipo de gobierno, «pero como en cualquier grupo», matizaron las mismas fuentes.

Desde el partido se mostraban confiados en que no habrá más concejales del PP que se unan a Martínez, al tiempo que se trasladó que si tan mal se estaba haciendo «y si tanto habla de ética», porque la concejala en cuestión no acudió a los juzgados a denunciar las carencias y los problemas de la sanidad ilicitana, según fuentes conocedoras de la conversación.

En estos momentos, el PP se queda con 13 concejales, uno más que el PSOE, mientras que el Partido de Elche tiene un edil y ahora el llamado grupo de no adscritos pasa a estar integrado por Cristina Martínez. Si el PSOE, Partido de Elche y Martínez quisieran, a partir de ahora ningún proyecto del PP que llegara al pleno podría salir adelante, lo que originaría una situación de ingobernabilidad en la ciudad inédita.

¿Más apoyos?

Por otra parte, desde el Ayuntamiento no se ve descabellado que algún que otro concejal popular muestre también su disconformidad con la política seguida por la alcaldesa. La concejala María José López ya ha expresado en varias ocasiones que aunque apoye a Cristina Martínez eso no se debe entender como que abandone el grupo municipal del PP, algo que descarta, además de tener previsto agotar estos cuatro años de responsabilidad municipal junto a Alonso.

La crisis de gobierno iniciada hace dos semanas, un tiempo en el que el grupo municipal popular ha visto cómo la preocupación iba a en aumento, sobre todo tras la manifestación del pasado miércoles donde un millar de personas mostró su apoyo a Martínez, ha terminado por confirmarse y en estos momentos nadie sabe todavía qué consecuencias y alcance puede tener.

Ésta es la primera y prácticamente única crisis de gobierno desde que Mercedes Alonso tomara las riendas de la Alcaldía en 2011. Y hasta hace apenas dos meses todo apuntaba a que el PP podría revalidar en Elche la mayoría absoluta, con una alcaldesa que incluso había hablado de su ciudad no sólo en la capital de la provincia, sino también en la del reino, además de ser todo un valor en alza dentro del PP regional.

Oposición

Pero una única edil, de momento, está consiguiendo lo que no han conseguido los socialistas ni el Partido de Elche en tres años: poner a Alonso en un verdadero aprieto y al borde de un precipicio.

Después de trascender que Martínez había solicitado su renuncia a continuar bajo la disciplina del grupo municipal del PP, la alcaldesa convocó de urgencia una reunión con todo su equipo para abordar este asunto. En ese encuentro lo cierto es que la gran mayoría de los concejales y la propia alcaldesa no se sorprendieron de que Martínez finalmente haya abandonado el grupo municipal popular.

Mercedes Alonso no quiso hacer ayer ninguna valoración al respecto y será hoy cuando se pronuncie por la situación en la que queda el equipo de gobierno.

Cristina Martínez, que de momento a día de ayer seguía siendo la responsable de Sanidad y Consumo de Elche, ha abierto así una grieta en el ejecutivo local a diez meses de las elecciones municipales.