El Banco de Recursos Biológicos y Géneticos de la Fauna Amenazada de la Junta de Andalucía, que está ubicado en el Instituto de Bioingeniería de la Universidad Miguel Hernández de Elche, se ha convertido en un centro pionero en la conservación de la fauna amenazada, incluyendo en sus instalaciones hasta 4.678 muestras de 423 individuos en peligro en extinción, según los datos facilitados en la mañana de ayer por la profesora de Zoología de la UMH y directora del banco, Trinidad León. De esas 4.678 muestras que contiene el banco, 4.257 corresponden a 301 individuos de lince ibérico, especie en la que ha especializado desde que, en 2005, la UMH y la Junta de Andalucía firmaron el primero de los convenios que les ha unido en una trayectoria marcada por la investigación y el estudio de enfermedades (y sus soluciones) para perservar el lince. El resto de muestras, según se avanzó ayer, pertenecen a otras especies en peligro de extinción como el águila imperial, el quebrantahuesos, el alimoche o el águila perdicera.
La jornada de ayer se caracterizó por la visita al Instituto de Bioingeniería del campus de Elche del director general de gestión del Medio Natural de la Junta de Andalucía, Francisco Javier Madrid, y el coordinador del lince ibérico, Miguel Ángel Simón, acompañados por el vicerrector de Investigación e Innovación, Fernando Borrás, y la directora del banco, Trinidad León, destacando que este centro «es el primer banco de células y tejidos vivos de animales en peligro de extinción de todo el territorio español, anticipándose incluso a la ley de patrimonio natural de 2007, así como el primero especializado de una comunidad autónoma». Los trabajos de imnvestigación, seguimiento y estudio también han logrado en todos estos años «realizar un mapa genético de los animales, y conseguir saber el origen de algunas de las enfermedades que padecen habitualmente», aseguró la directora del banco, al tiempo que matizó que también se han estudiado especies autóctonas de esta u otras zonas de España, como la malvasía cabeciblanca, la cerceta pardilla o el urogallo cantábrico. En este sentido, los representantes de la Junta de Andalucía no descartaron que, en breve, también se pueda introducir el lince ibérico en el Levante, como se va a hacer ahora en Castilla-La Mancha y Murcia.
