Agentes de la Policía Nacional de Elche se incautaron ayer de cerca de un millar de pares de zapatos en un almacén y en una fábrica del polígono de Carrús. Esta operación se suma a la llevada a cabo el pasado 23 de mayo en una empresa ubicada en la carretera de Crevillent y en la que los agentes de la UDEV requisaron unos dos mil pare de zapatos.
Tanto la operación llevada a cabo el pasado 23 de mayo,como la que tuvo lugar ayer, parten de la denuncia del propietario de la empresa Calzados Penélope, Pedro Romero.
Romero, aseguraba ayer «que gracias a la denuncia de algunos clientes, averigüé que se estaban comercializando unos zapatos exactamente iguales a los modelos de Calzados Penélope. Iguales en diseño, pero de peor calidad».
El empresario explicaba «se trata de modelos de la colección de verano que ya llevan tiempo en los escaparates de algunas de las principales tiendas de calzado de Elche y de toda España. Es una práctica habitual en esta ciudad que gente con poca ética haga fotos de los escaparates y copie los modelos para venderlos con su marca y a menor precio, ya que son de peor calidad».
Nueva operación policial
Los agentes de la Comisaría de Policía de Elche se incautaron ayer de cerca de 300 pares un almacén del Polígono de Carrús y de más de 600 de una fábrica, ubicada en la misma zona. Se trata de un millar de pares de zapatos que se suman a los dos mil incautados hace apenas quince días.
«Ya he presentado la correspondiente denuncia contra Calzados España y contra Bertofran por delito contra la propiedad industrial, ya que todos los modelos los tengo patentados», indicaba Romero, que añadía que «espero que estas denuncias sirvan para que se deje de llevar a cabo esta práctica en Elche ya que no está bien que se alguien se beneficie del trabajo y del esfuerzo de los demás».
Por su parte, ayer, responsables del almacén Calzados España declaraban no haber cometido ninguna irregularidad. «Nosotros somos un almacén de compra y venta de calzado. Hemos aportado todas nuestras facturas a la Policía, pero no podemos saber si el calzado que compramos es copia o no. Nosotros somos los grandes perjudicados ya que nos hemos quedado si el stock de zapatos y sin el dinero de su venta», declaraba el responsable.
