Elche es una ciudad verde acústicamente hablando, según indicó ayer el edil de Empresa y Empleo, Luis Ángel Mateo. Una idea que no es compartida por la Asociación de Afectados por el Ruido que agrupa a los vecinos que son «víctimas» de los ruidos generados por los locales de ocio de la ciudad.
No obstante, Mateo reconoció que una quincena de calles en la ciudad superan los decibelios recomendados y anunció que el Ayuntamiento va a llevar al próximo pleno un plan de acción que recogerá medidas concretas para «intentar luchar contra la contaminación acústica».
«Ya elaboramos una ordenanza de lucha contra la contaminación acústica, teniendo en cuenta esa sensibilidad del equipo de gobierno en cuanto a conciliar la actividad económica del sector de la restauración y el ocio con el derecho al descanso de los vecinos se elaboró esta ordenanza, en la que se recogían una serie de iniciativas encaminadas a velar por el descanso de los vecinos, y se elaboró un plan de acción donde se recogían medidas concretas y el realizar distintas campañas de concienciación hacia los clientes de estos locales para intentar, entre todos, luchar contra la contaminación acústica que se desprende de los locales de ocio».
Luis Ángel Mateo señaló que en Elche hay un total de 15 calles que van a ser incluidas en el catálogo de Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS). «Estamos hablando de algunas zonas en concreto como son el centro de la ciudad, el barrio de La Zapatillera y algunas calles de Carrús. Las calles que más objeto de quejas por parte de los vecinos son San Vicente, Pedro Ibarra y las Chimeneas de l'Algeps», apuntaba el responsable municipal.
Este plan de acción será debatido en el próximo pleno municipal e incluye medidas como colocar limitadores de sonido en los pubs, la elaboración de planes acústicos previos a la apertura de nuevos locales, la obligatoriedad de que los locales de ocio cuenten con una persona en la puerta o la realización de un mayor número de campañas de concienciación.
Por su parte, la presidenta de la Asociación de Afectados por el Ruido de Elche, Mari Luz Costa, declaraba ayer que «el Ayuntamiento no se ha puesto en contacto con nosotros para exponernos este plan de acción. Nosotros pedimos que sean más contundentes ya que la cantidad de decibelios permitidos en el exterior está en 45 y puedo decir que dentro de mi casa se han llegado a registrar 77 decibelios. Lo que no puede ser es que en las terrazas se estén colocando más mesas de las autorizadas. Es decir, el Ayuntamiento está permitiendo que se incumplan las leyes que ellos mismos han creado. Están incumpliendo su propia ordenanza».
