Tres coches de bomberos tuvieron que intervenir ayer tarde para sofocar el fuego en los matorrales de un chalet situado cerca del camino de La Galia. Según los bomberos, el fuego se produjo por causas desconocidas, pero el fuerte viento que soplaba ayer por la tarde, sobre las 19 horas, les obligó a intervenir para evitar que las llamas alcanzaran las viviendas próximas. Aunque no hubo que lamentar heridos, los vecinos de las viviendas próximas abandonaron sus hogares hasta momentos después de que los bomberos apagaran las llamas de los matorrales y de algunos árboles y mojaran la vegetación del entorno.

En la operación intervinieron un total de diez agentes y tres coches: una nodriza y dos autobombas.

Además, los bomberos procedieron ayer a la apertura de una vivienda cuyo propietario sufrió una rotura de cadera.