Cautos, muy cautos. Así se mostraron ayer todas las partes implicadas en la polémica que ha acompañado desde hace semanas a la designación del sustituto de Moisés Jiménez al frente de IFA. Ni la alcaldesa de Elche, Mercedes Alonso; ni el vicepresidente y portavoz del Consell, José Císcar; ni el propio Jiménez responsable también de Coepa quisieron pronunciarse sobre la propuesta de designar presidente de IFA al empresario ilicitano y dirigente de la Asociación Española de Empresas de Componentes para el Calzado (AEC), Manuel Román, hasta que se haga oficial... Y en la misma línea se mostró Román. Sólo el empresario del sector del metal Manuel Fernández, que hasta hace nada se daba por hecho que sería el presidente del recinto ferial, dio un paso al frente y entró a valorar el nombramiento, pero también con mucho recato: «Creo que es una decisión muy acertada», reiteró en varias ocasiones.

Fernández, director gerente de Ferrotall una compañía situada en Elche Parque Empresarial y dedicada a los componentes y la maquinaria, era la apuesta de Císcar e incluso llegó a convertirse en presidente virtual de IFA, pero Alonso finalmente empezó a mover ficha hasta que acabó tumbando la propuesta.

Con este escenario de partida, Manuel Fernández aseguró ayer que «yo tengo mucha amistad con Manolo en alusión a Manuel Román, lo aprecio mucho, es una persona muy válida y creo que es una decisión tan acertada como hubiera podido ser la mía». No en vano, puso el acento en que «yo estoy en IFA desde la época en la que Antonio Martínez estaba de director general, pero Manuel Román también es una persona de Elche que conoce la institución porque lleva muchos años dentro, y eso es lo importante, porque necesitamos gente que crea en el proyecto y lo conozca, para que se pueda acabar». Con ello, el empresario hacía referencia a la ampliación de IFA y, especialmente, a las obras del pabellón multifuncional IFAarena. «No voy a entrar en la línea que debe seguir, ni en si va a ser continuista o no, pero hay unos proyectos que se tienen que acabar. El terreno ya está urbanizado para la ampliación de IFA y sólo falta la máquina de producir, que será el Arena, un proyecto muy bonito y que resultará rentable», sentenció.

El empresario ilicitano explicó que fue el propio Jiménez el que le comunicó la decisión: «Nada más comentármelo, llamé a Manuel Román para felicitarlo y para ponerme a su disposición», comentó. En esta línea, aseguró que «mi continuidad en el comité de dirección de IFA dependerá del nuevo presidente, y yo le presentaré mi renuncia cuando se haga efectivo el cambio para que sea él quien decida, aunque ya me ha dicho que cuenta conmigo y yo, a su vez, ya le he dejado claro que estoy para lo que necesite y que le voy a ayudar en lo que haga falta».

Respecto a las sensaciones que quedan después de ver frustrado su nombramiento, afirmó que «yo siempre dejé claro que la decisión la toma el Consell, y que el presidente del Patronato de IFA es el conseller de Industria, y he visto pasar a varios presidentes en estos años. Yo era la propuesta de Moisés, pero podría haber sido cualquier otra persona del comité», y añadió que, «aunque siempre es un halago que piensen en uno, era consciente de que iba a ser una responsabilidad que se iba a sumar a la tarea del día a día».

En cuanto a Mercedes Alonso y el rechazo a su nombramiento, Fernández se limitó a decir que «tengo una buena relación con la alcaldesa, pero había varias propuestas encima de la mesa procedentes de varios sectores, y, al final, ha salido la propuesta del Consell, porque es quien tiene la última palabra».