Las multas de tráfico se han reducido a la mitad en los últimos seis años, según se desprende de los datos que maneja en estos momentos la Concejalía de Hacienda y Suma, el organismo tributario de la Diputación de Alicante que se encarga del cobro de las sanciones que impone la Policía Local, fundamentalmente por estacionamientos indebidos, direcciones prohibidas o el uso del móvil al volante, entre otras cuestiones. No en vano, de las 53.945 infracciones que se penalizaron en 2007 se ha pasado a 25.890 durante el pasado ejercicio, en una caída progresiva que se ha ido experimentando año tras año, y que sólo se vio truncada en 2011, cuando se registró un ligero repunte, para volver a descender los números en 2012, incluso por debajo de los de 2010.

En cuanto a la recaudación, ha bajado en un 29,8% en los últimos seis años, de forma que frente a los 4,3 millones de euros de 2007 se ha pasado a 3 millones en 2012, aunque con ligeros incrementos en 2010 y, especialmente, en 2011, cuando incluso se llegó a los 3,5 millones de euros. De hecho, no fue hasta el ejercicio pasado cuando se recuperaron los niveles de 2009, con 3 millones de euros.

El concejal de Hacienda, Manuel Latour, incide en que, "en los últimos años, se ha detectado una mayor concienciación de los conductores, especialmente en lo que respecta a estacionamientos indebidos en áreas de carga y descarga o vados, dobles filas o al aparcamiento en zona azul, o por la conducción mientras se habla con el móvil, en este caso porque cada vez más la gente utiliza el manos libres". El edil apunta a la crisis como principal responsable de esta concienciación, pero también a las reformas de la legislación en materia de tráfico, a lo que se une otro factor: el descenso de entre un 15% y un 20% en la circulación rodada en la ciudad, por el menor uso del coche como consecuencia de la situación económica, según los informes de Tráfico y Transportes.

Latour, además, pone el acento en que "este Ayuntamiento no tiene ningún afán recaudatorio, como demuestra el descenso en el número de multas y en la recaudación y, de hecho, los agentes de la Policía Local son conscientes de que la situación económica no es muy boyante y que no se puede gravar más la economía de los ilicitanos. Por eso, muchas veces lo que se hace es llamar la atención al conductor, pero no se llega a sancionar".

Paralelamente, durante estos seis años, también se ha experimentado un descenso de las sanciones que pasan a vía ejecutiva, de forma que, mientras que entre 2007 y 2009 representaban el 33% del total de las infracciones penadas, a partir de 2010, coincidiendo con la reforma de la Ley de Tráfico, que establecía una bonificación del 50% por el abono en periodo voluntario, las multas apremiadas han ido descendiendo, hasta el punto de que en 2012 se llegó al 26,30%, lo que se traduce en un 7,03% menos respecto a los datos de 2007. "La gente ahora prefiere pagar la mitad de la multa y no arriesgarse a presentar un recurso, perderlo y tener que pagar así el cien por cien de la sanción", comenta Latour.

En cualquier caso, los datos con los que cuenta Hacienda revelan que, de las 6.808 multas que pasaron a vía ejecutiva en 2012, 5.203 estaban pendientes de abono al cierre del ejercicio, 85 fueron cerradas por baja -porque se admitieron los recursos-, mientras que 1.520 se pagaron. También las que se cerraron por baja en periodo voluntario han descendido de forma significativa desde 2007, en un 75%, pasando de los 3.061 a los 764, por el menor número de alegaciones que se presentan en estos momentos, ante el temor de que no prosperen.

Por otro lado, el responsable municipal de Hacienda recuerda que en los presupuestos de este año hay consignados 2,1 millones de euros por la recaudación de multas de tráfico. En esta línea, el edil detalla que, "para elaborar el presupuesto, tenemos en cuenta los derechos recaudados en los últimos tres años, y no los derechos reconocidos como se hacía anteriormente, para conseguir ajustarnos a la realidad".

Los arrastres de la grúa también caen

La memoria anual de la empresa municipal Pimesa ya ponía de manifiesto al cierre del pasado ejercicio una caída en los arrastres de grúa cifrada en un 15,07%, ya que estaba previsto que al cierre de 2012 se llegara a los 15.681 frente a los 18.338 de 2011 y los 20.264 de 2010. No obstante, el documento de la empresa municipal prevé que para este año se llegue a los 15.681 arrastres, de los que el 60% corresponderían a infracciones de tráfico y el resto a servicios de la Policía Local. De hecho, se contempla que los arrastres se sitúen en torno a los 4.000 por trimestre, salvo en los meses estivales, cuando se calcula llegar a los 2.579.