El montaje de la antigua fuente de la Glorieta en la zona de 1.000 metros cuadrados que se ha ganado para el Parque Municipal comenzó ayer. Para ello, los operarios de la empresa Aigües d´Elx, encargada de la instalación de la infraestructura, tuvieron que recurrir a la ayuda de una grúa para desplazar las copas de hormigón que se han hecho nuevas y que pesan en torno a los 350 kilos.

La fuente había permanecido en los últimos años en la plaza de las Corales. Sin embargo, con las obras de remodelación que se hicieron en el paseo de la Estación con cargo al Plan E, se retiró con la intención de rehabilitarla y trasladarla hasta la ampliación del Parque Municipal, en el área que, hasta ese momento, se destinaba al aparcamiento de los autocares.

El montaje, lógicamente, no pasó desapercibido para los peatones y conductores que transitaron ayer por el lugar, especialmente por la avenida Alcalde Vicente Quiles Fuentes. Incluso fueron muchos los que tiraron de teléfono móvil para inmortalizar el momento, aunque hubo opiniones para todos los gustos, desde las de los que estaban encantados con que se recupere esta fuente tan asociada a la infancia de prácticamente todos los ilicitanos, hasta las de los que se quejaban del coste que podía suponer una obra de estas características, aunque sí es cierto que fueron los menos.

La idea es que las copas estén totalmente montadas mañana como muy tarde y, a partir de ahí, que continúen los trabajos para acabar con las acometidas, la caseta y los enganches. Posteriormente, será cuando comiencen las primeras pruebas y los posibles ajustes que haya que hacer.

No obstante, las obras en la zona no está previsto que concluyan hasta el mes de agosto, ya que todavía están pendientes las labores de ajardinamiento y el acondicionamiento de la acequia de Candalix, una infraestructura de origen árabe que ya ha quedado al descubierto en la nueva zona del Parque Municipal.

En cuanto a la fuente, se le ha dado la forma ovalada que tenía originariamente, cuando se encontraba en la Glorieta. No obstante, las copas serán de hormigón y no de cerámica, como en sus inicios, por una cuestión de resistencia de materiales.

La intención era poder rehabilitar las piezas. Sin embargo, en su momento ya explicaron desde Aigües d´Elx que estaban destrozadas, por lo que fue necesario volver a hacerlas de nuevo. Para ello, se tuvo que buscar a un artesano que elaborara la primera pieza a mano, puesto que el molde original tampoco apareció. Fue así como, sobre esa copa, se fundieron el resto para que todas fueran idénticas. En cuanto a la tonalidad, la instalación es de color rosado aunque, con el efecto del agua, ganará un color más oscuro, según fuentes técnicas. Para diseñar la nueva fuente, de hecho, los técnicos municipales recuperaron fotografías antiguas de la fuente cuando estaba instalada en la Glorieta.

Por la parte de atrás, la más cercana a la avenida Alcalde Vicente Quiles Fuentes, la infraestructura estará cercada por una especie de pasadizo, mientras que por la delantera se han hecho dos pequeñas escalinatas.

Las copas se están instalando con precisión milimétrica, y se engarzan entre sí con una especie de cuña, mientras que la que corona cada una de las torres va enroscada con una pletina.

Por otro lado, la fuente incluye hasta una veintena de torres, la más alta compuesta por cuatro copas y la más baja integrada por una sola pieza, aunque intercaladas entre sí en función de los tamaños.