Muchos escritores continúan escribiendo a los 90 años, pero comenzar a hacerlo a esa edad es algo más peculiar. Este es el caso de Benita Martín, una extremeña residente en Elche que, hace un año, se sumergió en su memoria para recordar sus vivencias a lo largo de sus 89 años, edad que tenía cuando comenzó a escribir "Memorias de mi vida", un libro que, ya en el título, recoge el carácter personal de su texto, pues se trata de un libro "escrito con el corazón".

Benita Martín nació en Torremenga, un pequeño pueblo de la provincia de Cáceres (664 habitantes a 1 de enero de 2011, según el INE). Se trasladó a Elche en el año 69, a sus 46 años, en busca de "un futuro mejor para mis hijas", según asegura ella misma, ya que, aunque a ella le gustaba esa vida, "por aquel entonces el único futuro que había para mis hijas era trabajar en el campo o en el servicio de alguna casa, y me dolía que ellas no tuvieran un futuro mejor". Todas esas vivencias son las que ha recogido en su libro, en el que cuenta con detalle (y con gran precisión) los principales acontecimientos de su vida, a pesar de que nunca se lo había planteado. "A mí me ha gustado siempre aprender, así que un día, viendo a mi hija escribir en el ordenador le dije que me enseñara. Así fue como surgió escribir mis memorias", cuenta. Desde ese momento comenzó su viaje a través de su propia memoria, recordando momentos, vivencias e incluso a personas que ya no están.

Esta fue la parte más difícil, según cuenta, pues en ocasiones la nostalgia y los recuerdos por lo que ya no están la han emocionado en varias ocasiones a medida que los iba recordando. Incluso, afirma, que había momentos en los que, escribiendo, "tenía la sensación de tenerlos al lado".

Benita Martín fue durante poco tiempo a la escuela, donde aprendió a leer y a escribir. Sin embargo, siempre ha sido una apasionada de la lectura. Sus familiares y amigos la describen como "una mujer adelantada a su tiempo y sin pelos en la lengua". No en vano, a lo largo de su obra, no duda en ser sincera y decir lo que piensa, aunque se trata de su propio hermano, ya que "escribir para contar mentiras o no decir las cosas tal cual son, no merece la pena".La edición de la obra es un regalo de una de sus hijas por su 90 cumpleaños y aunque se muestra muy orgullosa de su obra, ha rehusado poner su obra a la venta, ya que "contiene información muy íntima. Es mi vida". Por tanto, los 100 ejemplares editados se los regalará a amigos, vecinos y familiares.

Prepara nuevas obras que espera editar

Tras editar "Memorias de una vida" el pasado agosto, Benita Martín continúa escribiendo. Los cuentos infantiles son ahora su objetivo. Ha escrito diversos relatos que, espera, se publiquen en breve. Otro de los proyectos literarios que tiene pendientes también relatará su vivencia personal. Asegura que le fascina el proceso de vida y reproducción de la cigüeña, animal al que siempre le ha gustado observar durante horas. Por tanto, describirá todo lo observado, ya que "la naturaleza tiene detalles que a menudo pasan desapercibidos pero son increíbles". i. j. iniesta