Rafael Calvo Rodríguez anunció ayer oficialmente su intención de dejar la presidencia ejecutiva de la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE) tras haber permanecido más de 30 años como máximo dirigente de la patronal zapatera. Calvo ocupó el puesto de secretario general en una primera etapa y el de presidente en los últimos veinte años. La decisión de Calvo estaba tomada hace algún tiempo, pero se había venido aplazando desde que en 2010 se produjo una reestructuración en FICE, delegando el presidente parte de sus funciones en el secretario general, Javier García Lillo.
El anuncio se produjo en la reunión que el comité de FICE celebró ayer en Madrid y con la presencia de las nueve asociaciones zapateras de España, entre ellas la Asociación Valenciana de Empresarios del Calzado (Avecal), que agrupa a empresas de Elche, Elda y Villena. No obstante, el día antes, en el transcurso de una cena con los presidentes de las asociaciones regionales, Calvo comunicó su decisión de dejar la presidencia. Así y todo, ayer, los miembros del comité le insistieron, aunque sin éxito, para que continuara al frente de FICE. Rafael Calvo, con 68 años, ha considerado que ya era el momento de dejar el cargo. "Era una decisión que ya tenía tomada y que, por diversas circunstancias, he tenido que aplazar. Creo que ya es el momento de descansar", afirmó a este periódico.
El comité ejecutivo de FICE acordó la conveniencia de que la patronal siga contando con un presidente ejecutivo con plena dedicación a la federación y a la defensa de los intereses empresariales del sector. Así, el proceso que se inicia ahora contempla la convocatoria en los próximos días de una asamblea que probablemente se celebrará a finales de enero o principios de febrero del próximo año y en la que el comité propondrá al empresarios de Elda José Sanchís, actual vicepresidente, para que ocupe la presidencia de la patronal.
Mandato
Sanchís está dispuesto a asumir la máxima responsabilidad en FICE, pero no desea ser un presidente ejecutivo, ya que ello le restaría tiempo para dedicarlo a su empresa. Por ello, según explicaba ayer Rafael Calvo, "aunque el mandato es por cuatro años la intención es que en cuanto se pueda contratar a un presidente ejecutivo se lleve a efecto y así José Sanchís se apartará de la presidencia".
La necesidad de contar con un presidente ejecutivo, como lo ha sido Rafael Calvo, ha sido uno de los principales asuntos de debate en este proceso de relevo de cargos, ya que las antiguas experiencias del empresario-presidente no habían dado muy buen resultado.
Rafael Calvo manifestó ayer su satisfacción "por el ambiente de cordialidad que ha habido entre todos los presidentes de las distintas zona zapateras y porque todos los acuerdos se han tomado por unanimidad". Calvo hacía estas declaraciones pocas horas después de hacer oficial un anuncio y una decisión con la que se pone fin a una etapa en la patronal.
Creada en el año 1977, FICE es la única organización empresarial que representa los intereses generales del sector del calzado a nivel nacional, autonómico, e internacional. Aglutina en la actualidad a más de 600 empresas asociadas que representan el 90% del la producción, distribución y exportación del sector en el territorio nacional. La provincia de Alicante acapara más del 65% del potencial del sector.
Descartado el relevo con Javier García Lillo
La opción de que el secretario general de FICE, Javier García Lillo, asumiera la presidencia ejecutiva de la patronal quedó ayer descartada totalmente a pesar de que Rafael Calvo la había sopesado seriamente. Sin embargo, esta posibilidad no ha tenido el respaldo de todas las asociaciones zapateras, según pudo saber este periódico en fuentes de la patronal.
García Lillo ya venía ejerciendo algunas funciones que anteriormente desempeñaba Rafael Calvo y de momento continuará con su puesto de secretario general.
También se ha descartado la contratación inmediata de un ejecutivo externo a la federación para que ejerciera las funciones de presidente. La intención es afrontar, con José Sanchís de presidente, una etapa de transición hasta que, "de forma tranquila y sin prisas, se esté en disposición de hacer valer el acuerdo del comité: Contar con un presidente ejecutivo de plena confianza", señalaba ayer Rafael Calvo, quien hasta la asamblea seguirá ejerciendo de presidente. D. L.
