Pocos kilómetros separan las pedanías ilicitanas de El Altet y de los Arenales del Sol, ambas situadas en un enclave privilegiado de alto valor ecológico y unidas por un mismo litoral. Sin embargo, los escenarios son antagónicos. Los Arenales del Sol siguen gozando de buena salud en cuanto al turismo se refiere, mientras que El Altet se está convirtiendo en el destino de aquellos que buscan una playa despoblada.

Hace tres años el pequeño aparcamiento situado en la zona dunar de la playa de El Altet era sustituido por uno más grande pero a mucha más distancia de la primera línea del mar. Este hecho, afirman los comerciantes del lugar, ha afectado a la afluencia de visitantes debido a que "antes había un aparcamiento a pie de playa y ahora no. Dicen que no se puede usar pero los camiones cargan allí la basura".

El Ayuntamiento de Elche habilitó esta temporada un servicio de autobús gratuito para quien quiera acceder con el desde el aparcamiento a la playa, y con el coste de un euro para quien lo haga desde la pedanía. Sin embargo, esta medida no ha contribuido al aumento de bañistas. De hecho, el servicio de tumbonas también ha desaparecido debido a la falta de clientela.

Según los empleados del chiringuito, la crisis y las mejores infraestructuras de Arenales del Sol tienen la clave: "Este año ha venido la mitad de gente que la temporada anterior, y además realizan muy poco gasto. La mayoría vienen preparados con su nevera". Además, señalaban que "en esta playa la limpieza la hacen más tarde que en el resto y con prisas. Están dedicando más esfuerzos a Arenales y aquí, que es una playa virgen y más bonita nos están dejando de lado. Por si fuera poco, muchos vehículos quieren aparcar en la zona más cercana, y se pegan tanto entre ellos que acaban con arañazos".

La imagen de la playa de los Arenales del Sol contrasta con la de su compañera de enclave, si bien en el chiringuito de Arenales afirman que, "crece el turismo extranjero pero baja la afluencia de gente y la calidad de consumo, en vez de comer solo piden bebida". Por su parte, desde el Centro Náutico de Arenales se indica que aunque hay menos veraneantes, es la oferta de ocio la que atrae a la gente: "La playa de Arenales tiene muchos alicientes, puedes realizar lo mismo que en cualquier otra playa, además de deportes acuáticos y un ambiente diferente que se alarga hasta la madrugada, es un lugar de diversión. Pero aún así ha habido un descenso de turistas".

Los usuarios de Arenales del Sol coincidían en que acudían a esta playa "por costumbre", indicando que también la prefieren porque "sin necesidad de coger el coche puedes ir a tomar un helado o a pasear por los puestos del paseo marítimo". Asimismo, muchos de los que acuden a El Altet afirmaban buscar un "entorno despoblado, lejos de costas masificadas y sin tener un paisaje rodeado de edificios".