Los vendedores de antigüedades hacen un buen balance del funcionamiento del mercadillo tras llevar varios fines de semana instalando sus puestos en el Paseo de la Estación, junto al Hogar del Pensionista, y dejar atrás la ubicación que tenían en el pasaje del Periodista Avelino Rubio.

El cambio de lugar se solicitó ya el pasado invierno tras comprobar, poco después del nacimiento del mercadillo -en noviembre del pasado año-, que la calle peatonal que daba a la ladera del río resultaba demasiado fría en invierno y, previsiblemente, sería muy calurosa en verano.

No obstante, el calor no ha sido lo peor que han sufrido los vendedores, sino los olores. Y es que el pasaje peatonal en el que estaban instalados parece que era utilizado habitualmente por algunos jóvenes para orinar la noche de los sábados, por lo que los domingos por las mañanas, y tras la llegada de las altas temperaturas se hacía insoportable estar allí, según ha podido saber este diario.

Frente a ello, los vendedores se muestran satisfechos con el nuevo lugar, "más espacioso", y sobre todo, por resultar más accesible, tanto para los vendedores como para los aficionados que vienen de fuera a visitar los puestos.

En este sentido, el presidente de la nueva Asociación de Anticuarios de Elche -surgida a raíz del mercadillo-, Valentín Sánchez, señaló que los puestos han funcionado muy bien en los fines de semana que llevan en la nueva ubicación. "Es un sitio donde se atrae y se retiene más a la gente", apuntó. Además, también destacó su amplitud y el hecho de que esté en un lugar próximo a varios aparcamientos.

Así, según Sánchez, el mercadillo suele atraer a personas aficionadas a las antigüedades de poblaciones cercanas, que llegan, por tanto, con sus vehículos y visitan la ciudad. En ese sentido, la nueva ubicación les favorece.

Del mismo modo, también es mejor para los propios vendedores, que han de instalar sus puestos y esto les facilita poder acceder mejor con sus vehículos.

Además, se trata de un lugar más amplio y el responsable comunicó que las previsiones es que el mercadillo se vaya ampliando de cara a un futuro. "Nos llaman incluso desde Valencia gente interesada en venir a poner puestos pero la gente de Elche tiene prioridad", apuntó.

Por el momento el mercadillo, que se instala todos los domingos por la mañana, tiene alrededor de veinte puestos dedicados a las antigüedades. Estos atraen la mirada tanto de los aficionados como de transeúntes, que, como ayer, sentían curiosidad por algunos objetos expuestos. Así, se puede encontrar desde juguetes a útiles de labranza o herramientas antiguas para fabricar zapatos. Además, a esta oferta se añaden varios puestos dedicados al arte, con cuadros y fotografías.